A pesar de que el pacto de coalición se firmó hace apenas un año, PSOE y Unidas Podemos ya han dejado patentes algunas de sus diferencias en materia socioeconómica. El último gran debate, y primero del año, ha sido el aumento del periodo de cálculo de las pensiones, provocando el desacuerdo entre el ministro de Seguridad Social, José Luis Escrivá, y el vicepresidente segundo del Gobierno, Pablo Iglesias.

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Ahora ha sido el secretario de Estado de Derechos Sociales y responsable económico de Podemos, Nacho Álvarez, quien se ha pronunciado sobre el debate en una entrevista a El País. Calviño y Escrivá plantean reformas que van contra el pacto de coalición”, afirma el economista, que ha participado en la negociación de los presupuestos y las principales medidas anticrisis.

“No teníamos experiencia en gobiernos de coalición, y creo que el primer año ha salido razonablemente bien. Este Gobierno ha discutido, ha discrepado incluso en público, pero ha tomado decisiones con las que sale reforzado: el ingreso mínimo vital, los desahucios, la moratoria hipotecaria, los presupuestos. Lo sorprendente es que haya miembros del Consejo de Ministros, como Nadia Calviño o José Luis Escrivá, que plantean medidas que van claramente contra el pacto de coalición”, reconoce Álvarez en la entrevista.

El secretario de Estado ha recordado que el acuerdo pasa por superar el marco laboral de 2012 para reequilibrar la negociación colectiva. Asimismo, asegura que “no caben recortes en pensiones que petrifiquen los desequilibrios que dejó la reforma del PP”.

"No vamos a tolerar que se incumpla el pacto"

En el aspecto laboral, el Gobierno de coalición ya ha mandado la reforma laboral a Bruselas, ante lo que Álvarez considera: “Llevamos media docena de reformas con el objetivo declarado de reducir la dualidad, pero las tasas de temporalidad están a niveles de hace 30 años”. “Hay que normalizar la discrepancia dentro del Gobierno, pero no vamos a tolerar que se incumpla el pacto”, recalca el responsable.

En el caso de las pensiones, el último gran desacuerdo, el secretario de Estado matiza: “Ni en el acuerdo de coalición ni en el Pacto de Toledo figura la posibilidad de ampliar el periodo de cálculo de las pensiones, que en la práctica es un recorte. Podemos no va a dar sus 35 votos en el Parlamento al servicio de una medida que se quiso introducir por la puerta de atrás. Difícilmente eso va a salir adelante en el diálogo social; ya no digamos en el Congreso”.

“El horizonte inmediato es de incertidumbre radical. Hay dos luces al final del túnel, la vacunación y los fondos europeos, pero este será un año de rebote limitado: 2022 será mejor si conseguimos activar un estímulo fiscal de un tamaño y a una velocidad adecuados”, avanza Álvarez en un tono más positivo.

Además, explica que con las reformas “convendría acordarse de la crisis pasada: la vía de la erosión en los derechos laborales y sociales no funciona. Hay que reconstruir el contrato social que voló por los aires en la última década: reformas que vayan en la dirección de volver a socavarlo están destinadas al fracaso económico, pero también social y político”.