La principal asociación de empresarios a nivel nacional, CEOE, ha elaborado un informe en el que cuantifica las pérdidas económicas para las empresas españolas por el impacto de la crisis del coronavirus. El Departamento de Economía de CEOE ha sido el encargado de realizar este informe, en el que pone de manifiesto los daños que está ocasionando la crisis en el tejido productivo español.

Según las estimaciones del INE, la patronal asegura que las empresas perdieron 287.000 millones de euros en 2020 por el impacto de la pandemia. Por un lado, la información desagregada por grandes sectores destaca la fuerte caída del 22,2% de los servicios no financieros de mercado, que casi duplica el índice general.

El resto de sectores como las industrias extractivas y manufacturera (-11,7%), el suministro de energía eléctrica y agua, saneamiento y gestión de residuos (-10,1%) o el comercio (-11,9%) también registran descensos. “El sector servicios no financieros de mercado pasó de ser el más dinámico en 2019 a ser el más afectado por la crisis”, lamenta CEOE.

Según el informe de la patronal, las cifras del INE desvelan una pérdida de facturación de 270.000 millones de euros, con una caída de la facturación en la construcción del 11,6% en 2020 y una pérdida aproximada de 17.000 millones de euros. El informe matiza que el descenso ha sido superior en la obra civil que en la vivienda personal.

Pérdidas de 45.600 millones en el turismo

Por otro lado, CEOE recalca que el mayor impacto ha sido para los sectores relacionados con el turismo, con una mayor pérdida de facturación en términos relativos. Aquí destacan las agencias de viajes (-75%), alojamientos (-68%) y transporte aéreo (-60,1%). Los tres suman pérdidas totales de 45.600 millones de euros.

Estrechamente relacionado aparece el sector del transporte, vinculado a la actividad económica y fuertemente perjudicado por las restricciones de movilidad a nivel nacional e internacional. Asimismo, CEOE también destaca la situación del comercio, con una pérdida importante de facturación por las restricciones horarias, el periodo de confinamiento y la pérdida de ingresos de las familias españolas.

En el lado positivo, las actividades ligadas a los servicios informáticos y digitales, las actividades postales y de seguridad e investigación han sido las mejor paradas de la pandemia, con un impacto económico en su negocio de menor magnitud.

“La mayoría de los sectores de la economía española han estado muy afectados por la crisis provocada por la pandemia, tal y como se aprecia en las caídas en la cifra de negocios. Tanto es así que más de la mitad de los sectores analizados registraron retrocesos en la cifra de negocios de dos dígitos en 2020”, asegura CEOE.

50.000 empresas menos que hace un año

La patronal también menciona las consecuencias de estas caídas de facturación, lo que ha supuesto el cierre de muchas empresas a lo largo del año o en los primeros meses de 2021. Según las cifras del informe, el número de empresas inscritas en la Seguridad Social descendió entre febrero y abril de 2020 en más de 90.000 empresas, con el primer mazazo de la pandemia.

“El tejido empresarial comenzó a recuperarse después, aunque sin llegar a alcanzar los niveles previos a la crisis. Sin embargo, en los primeros meses del año 2021 ha vuelto a deteriorarse y en febrero las empresas inscritas en la Seguridad Social eran casi 50.000 menos que un año antes lo que supone una caída del -3,6%”, cifra la patronal.

Por tamaño de empresa, los niveles actuales son inferiores a los previos a la crisis en todos los segmentos, con las caídas más fuertes en el caso de las pymes. Por otro lado, en febrero, en 15 de los 20 sectores analizados, los niveles de empresas actuales son inferiores a los de hace un año y solo cuatro sectores presentan un número de empresas superior a los previos a la crisis.

Como era de esperar, gran parte de las empresas más afectadas por la crisis pertenecen a los sectores del turismo y del ocio. Según CEOE, las cinco ramas más castigadas por la pandemia en términos de tejido empresarial han perdido cerca de 40.000 empresas en un año, de las que casi 23.000 pertenecen a la hostelería.