Marta Ortega, hija del empresario Amancio Ortega, cogerá las riendas de Inditex este viernes 1 de abril, pasando a hacerse cargo de casi 6.500 tiendas repartidas por todo el mundo y de unos beneficios que alcanzaron los 3.243 millones de euros en su último ejercicio fiscal.
La nueva presidenta no ejecutiva de la compañía gallega se ha mostrado ilusionada y apuntaba: "He vivido esta empresa desde mi infancia y he aprendido de todos los grandes profesionales con los que he trabajado durante los últimos quince años. Siempre he dicho que dedicaría mi vida a desarrollar el legado de mis padres”.
En su discurso se acordó también de Pablo Isla, al que va a sustituir y que llevaba ostentado el cargo de presidente desde hacía 17 años: “Estamos enormemente agradecidos a Pablo Isla por su extraordinario trabajo y dedicación durante todos estos años. Me gustaría destacar su inmensa contribución, no solo a nuestro grupo, sino también a la industria de la moda en general".
Marta Ortega, que cobrará un millón de euros anuales por sus funciones al frente de la compañía, concretamente, 900.000 euros como presidenta del consejo de administración, y otros 100.000 en calidad de consejera, tendrá bajo su responsabilidad directa las áreas de auditoría interna, secretaría general y del consejo y comunicación. Su mano derecha será Oscar García Maceiras, consejero delegado desde el pasado mes de noviembre, cuando se anunciaron los cambios de dirección de la firma.
Inditex espera, con la renovación de la directiva y la culminación del plan de optimización de tiendas, seguir creciendo de forma selectiva en su espacio comercial bruto en los próximos años, con tiendas muy diferenciadas, totalmente integradas, digitales y sostenibles. Situación que la firma pretenderá alcanzar en los próximos cursos, a pesar de la afectación de la guerra de Ucrania a sus cuentas y de su apuesta por Estados Unidos como horizonte de negocio.
