El Grupo ACS celebra hoy viernes 10 de mayo, su Junta General de Accionistas. Será la primera que celebre después de materializar la compra de Abertis junto a Atlantia. La compañía afronta 2019 con el reciente anuncio de la creación de Zero-E, una nueva filial con la que se mete en el negocio de las energías renovables y, además, intensifica su internacionalización, con adjudicaciones milmillonarias que la afianzan como compañía líder mundial de las concesionarias.
La apuesta por la energía verde…
ACS ha lanzado una gran apuesta en el desarrollo de infraestructuras sostenibles. En la reunión que mantuvo con inversores y analistas el pasado 24 de abril, presentó su nueva marca Zero-E, que agrupará todo el negocio de las renovables. La nueva sociedad de energía verde parte con una cartera de 914 MW a través de sus parques fotovoltaicos, 150 MW en plantas termosolares, 397 MW de sus parques eólicos y 20 MW de hidroeléctrica. Cuenta, además, con 445 kilómetros de líneas de transmisión eléctrica y sus plantas desalinizadoras tratan 286.000 m³ de agua.
La previsión es multiplicar por más de 3,4 su cartera de negocio desde los 1.341 MW actuales hasta 4.500 en 2022. Y en 2023 se alcanzarían los 5.200 MW cuando estén operativas las nuevas instalaciones de producción energética sostenible. Se trata de 17 proyectos en total, diversificados en nueve países.
El Grupo estudia la salida de Zero-E a Bolsa y, según anunció la compañía, esta nueva estrategia se enmarca en una apuesta global por la energía verde que contribuya a la reducción de emisiones, en línea con los objetivos de Desarrollo Sostenible de la Agenda Global 2030.
…y la internacionalización
La otra gran apuesta del Grupo ACS en 2019 sigue siendo la internacionalización, que le permitió hace diez años sortear la crisis económica. Si se puede hablar de la recesión en términos de efectos positivos para el sector de la construcción, sería sin duda la apertura al exterior de las constructoras españolas. En este aspecto, ACS fue la primera que supo aprovechar la situación como una oportunidad y se lanzó a buscar clientes en el mercado internacional. Si en la antesala de la crisis la cifra de negocio exterior era de apenas el 14%, en 2017 representó el 87%, según figura en el informe anual correspondiente a ese año.
El Grupo ACS es líder mundial en el desarrollo de concesiones de infraestructuras, según el ranking de la revista Public Works Financing (PWF), un puesto que mantiene ininterrumpidamente desde 2012.
Por otro lado, la revista especializada años Engineering News Record (ENR) sitúa a ACS como líder mundial en facturación y a su filial alemana Hochtief, segunda. El último ranking de las 250 mayores constructoras internacionales de ENR, publicado el pasado mes de agosto, hablaba además de ACS como la séptima compañía mundial por cifra de ventas y la segunda cotizada.
Multiplica por 10 el volumen de negocio de sus competidores
ACS saca una enorme ventaja a las constructoras españolas con presencia en el mercado internacional, multiplicando por 10 el global de adjudicaciones de la competencia. En 2019 no sólo ha reforzado esas cifras, sino que van en aumento. En lo que llevamos de año suma una veintena de nuevas adjudicaciones por un valor cercano a los 13.000 millones de euros.
Hitos de 2019
Entre los principales hitos de 2019 hay tres proyectos con una inversión histórica: una línea de metro en Brisbane (Australia), una autopista en Virginia (EEUU) y la remodelación de la estación de Euston en Londres (Reino Unido).
El Grupo ACS se encargará del diseño y construcción de la nueva estación de Alta Velocidad de Euston, en Londres, que conectará 8 de las 10 ciudades más grandes de Gran Bretaña
3.400 millones en Brisbane
ACS, a través de su filial australiana CIMIC, construirá una nueva línea de metro en Brisbane, con un túnel bajo el río que cruza la ciudad, por un valor de 3.400 millones de euros, la mayor adjudicación de la historia del Estado de Queensland. El proyecto incorpora, además de la construcción, la instalación de todos los sistemas de señalización y telecomunicaciones de la línea, y su posterior mantenimiento una vez entre en funcionamiento.
3.000 millones en Virginia
La construcción de 15 kilómetros de la autopista Hampton Roads en Virginia (EEUU), que incluye un túnel y viaductos, con una inversión de 3.000 millones de euros. Esta autopista es el mayor proyecto de infraestructuras en la historia de Virginia.
2.000 millones en Londres
En Londres se ha adjudicado la construcción de la nueva estación de Euston para el tren de alta velocidad, un proyecto de 2.000 millones de euros.
Fuerte presencia en Australia
En estos primeros meses del año, ACS ha visto reforzada su presencia en Australia al ganar el concurso para el diseño, construcción y mantenimiento de una nueva red de transporte regional ferroviario en el area metropolitana de Sidney, por un importe de 760 millones de euros.
En total, la filial CIMIC ha obtenido en Australia este año concesiones por más de 4.500 euros y otra de 1.071 millones en Botsuana.
En cualquier caso, América del Norte es su principal fuente de ingresos y de Canadá vino una de las primeras adjudicaciones del año. El Grupo ACS, a través de su filial Dragados, consiguió su primer gran proyecto portuario al adjudicarse por 260 millones el diseño y construcción de la ampliación de la terminal de contenedores para la autoridad portuaria de Vancouver Fraser en British Columbia (Canadá). Dragados es uno de los mayores especialistas mundiales en la construcción de complejos marítimos, con una experiencia de más de 75 años en obras de este tipo.
Tres tramos consecutivos de autopista en Florida
El pasado mes de abril, el Grupo ACS sumó una nueva concesión en Florida (EEUU): la construcción de 46,7 kilómetros de la autopista Interestatal I-95 en los condados de Broward y Palm Beach, a través de Prince Contracting, subsidiaria de Dragados, con una inversión de 132 millones. Se trata del tercer tramo consecutivo de la I-95 adjudicado a Prince en los últimos tres años en este estado.
Por último, ACS se ha adjudicado el pasado mes de marzo, a través de su filial de ingeniería Intecsa Industrial, dos contratos por valor de 255 millones para la construcción de dos plantas de ácido sulfúrico en Marruecos.