Cimic, filial australiana de Grupo ACS, se ha adjudicado la construcción de un nuevo centro de datos en Filipinas. Un proyecto con el que la compañía sigue apostando por el continente australiano y el impulso de las nuevas tecnologías para digitalizar la sociedad. En este caso la ganadora del contrato ha sido Leighton Asia, a su vez subsidiaria de Cimic, que se encargará de varias fases del proyecto para la construcción de un centro a hiperescala.

Leighton Asia, parte de Cimic y de Grupo ACS, ha sido recientemente seleccionada por STT GDC Philippines para ejecutar la primera fase de STT Fairview 1, un proyecto multifase para el desarrollo de un nuevo centro de datos situado en Quezon City, en Filipinas. La empresa, parte de la multinacional de construcción y desarrollo de grandes infraestructuras a lo largo del mundo, se ha adjudicado este contrato a través de una joint venture con First Balfour.

El presidente ejecutivo de Cimic y consejero delegado de Grupo ACS, Juan Santamaría, ha celebrado este nuevo contrato adjudicado por la filial australiana. "A escala internacional, está aumentando la demanda de servicios en la nube y de la infraestructura digital vital que los sustenta. Nos complace trabajar con STT GDC Filipinas y aportar nuestra experiencia en el suministro, en el que se cumplen estrictos requisitos funcionales y de seguridad", mantiene Santamaría tras conocerse esta última adjudicación.

También el director general de Leighton Asia, Brad Davey, ha reiterado la importancia del contrato adjudicado en Filipinas: "Leighton Asia está encantada de formar parte en este importante proyecto para nuestro valioso cliente de datos, con proyectos en todas las regiones en las que operamos. Con nuestra experiencia internacional y local, Leighton Asia está altamente equipada para cumplir la visión de nuestro cliente en este proyecto transformador".

Cimic se une a la simbiosis entre megaconstrucciones y nuevas tecnologías

Cimic se ha convertido en uno de los actores claves de la economía australiana, con una fuerte apuesta en el diseño y la construcción de infraestructuras públicas, así como por el mayor uso de fuentes de energía limpia para la sociedad. Con este último contrato, esta vez en Filipinas, Cimic y Grupo ACS dejan constancia de su compromiso con la digitalización y el avance en todos los mercados en los que opera. Además de la construcción de este nuevo centro de datos en Australia, la compañía ha centrado parte de su negocio en asegurar la protección de los datos, la materia prima del siglo XXI.

Para ello, el gigante multinacional combina dos aspectos clave en su negocio: su experiencia en megaconstrucciones a nivel mundial con la protección de los nuevos activos digitales. ACS está inmersa en un proceso de transformación digital hacia la nueva era de datos. La multinacional diversifica ahora su negocio para impulsar la transición digital en aquellos mercados en los que opera, entre ellos Australia. Así, sus últimos proyectos encargados por las autoridades públicas combinan las labores de construcción habituales de la compañía con el impulso de los datos como nueva materia prima en el mundo digital.

Grupo ACS ha centrado su apuesta en el impulso y la protección de los data centers alrededor del mundo en los últimos meses. No solo Cimic se ha adjudicado contratos para ello en los últimos meses, sino que también otras filiales del grupo como Turner o Hochtief despliegan su experiencia para proteger la materia prima del siglo XXI. Las filiales de ACS son de las pocas compañías mundiales que tienen en sus manos la construcción de las infraestructuras que dan lugar a los data centers necesarios para el negocio tecnológico. Un papel que han celebrado desde la cúpula y que tiene su traslación en la práctica en los mercados en los que opera el grupo, tanto en Estados Unidos como en Australia, al otro lado del mundo. No obstante, el grupo también se encarga de digitalizar algunos países europeos como Polonia o su España natal.

La multinacional mantiene a día de hoy una estrategia de negocio que combina la construcción de infraestructuras tradicionales con un impulso a la digitalización. En la primera mitad del año, el grupo ha acumulado más de 4.000 millones de euros en proyectos de infraestructuras digitales, como el último data center que construirá en Filipinas, recientemente adjudicado. 

Con esta apuesta por los centros de datos, Grupo ACS profundiza en su evolución hacia los proyectos de nueva generación, marcados por la sostenibilidad y la digitalización. La multinacional cuenta ya con importantes contratos con las cuatro mayores empresas tecnológicas del mundo, convirtiéndose así en un actor clave para la digitalización del sector, combinando su know how en el diseño de megaconstrucciones y la protección de los derechos digitales de los ciudadanos.

Los data centers son bunkers tecnológicos críticos para la sociedad de hoy y de mañana. Su construcción implica un desafío adicional a la construcción de las megaconstrucciones adjudicadas habitualmente a las filiales de ACS. Se trata de centros con necesidades técnicas específicas, como la refrigeración, el suministro de energía y la conectividad para mantener su actividad, clave en la sociedad actual. Los data centers tienen que mantener una temperatura adecuada en su interior para evitar el sobrecalentamiento en los servidores y el equipo de almacenamiento, así como contar con una infraestructura eléctrica robusta y una conectividad adecuada. Algo de lo que ya se está ocupando Grupo ACS en los últimos meses.