El consejero delegado de British Airways, Alex Cruz, ha avanzado que la aerolínea prevé despedir a 10.000 empleados para hacer frente a la crisis del coronavirus. Esto supone alrededor del 30% del total de la plantilla aunque la cifra de despidos será menor que la inicial, prevista en los 12.000 empleados.

Además, ha explicado en el Parlamento Británico que espera abandonar pronto el plan de “despido y recontrato” que llevaba a cabo con sus trabajadores. Esto permitía a los empleados volver a la compañía pero con peores condiciones salariales.

De cara a la crisis del coronavirus, el directivo ha asegurado que la compañía “sigue luchando” para mantenerse a pesar de la fuerte reducción del tráfico de pasajeros por las restricciones a la movilidad, tanto nacional como internacional.

Por su parte, el sindicato británico Unite ha criticado las decisiones de British Airways en materia laboral y ha advertido de que el grupo propietario, IAG, podría tomar medidas similares en Iberia y Vueling en el momento en que termine el ERTE en el que se encuentran acogidos sus trabajadores.

Cruz también ha criticado la intención de algunos poderes políticos del Reino Unido para quitarle derechos de vuelo por franja horaria en el aeropuerto de Heathrow y asegura que solo serviría para favorecer a “competidores extranjeros”.