Se convirtió en uno de los iconos de la Gran Vía madrileña. Miles de personas venían cada semana, incluso fletando autobuses desde todas las partes de España, para acudir a comprar al establecimiento más famoso de la tienda low cost. 

En su número 32, Primark tiene alquilado un imponente local de 12.000 metros cuadrados en el que, a lo largo y ancho de sus cinco plantas, se pueden comprar prendas de ropa, accesorios y artículos del hogar. Sin duda, uno de los corazones de la Gran Vía de Madrid que siempre se encuentra rebosante de gente.

Sin embargo, mantener la tienda no es barato. La firma 'low cost' tiene que pagar una desorbitada cantidad de tres millones de euros para poder ocupar un lugar destacado en pleno centro de Madrid, en una de las zonas comerciales más destacadas en uno de los lugares más transitados de la capital. Por si fuera poco, el edificio pertenece a un gran rival, Inditex.

Se trata de una importante cantidad de dinero, un fuerte desembolso que, sin embargo, no ha supuesto una sorpresa para muchos usuarios, que conocen el importante tránsito de clientes que genera este lugar.

La firma de moda 'low cost' ha desarrollado un fuerte mercado en nuestro país desde que irrumpiera en nuestro territorio, en 2006. De hecho, se ha consolidado como una de las enseñas líderes del mercado, hasta el punto de cambiar el panorama del sector de la moda hacia una apuesta por menores precios.

Los tres millones de euros hacen entrever lo que puede costar un alquiler en la denominada como "milla de oro de la moda". Desde Plaza de España hasta la Puerta de Alcalá, más de un centenar de edificios acogen numerosas tiendas por las que pagan auténticas millonadas. Por ello, firmas como Inditex se han hecho con diferentes edificios como el de Gran Vía, 32. Sin embargo, a la larga supone un ahorro de precios ya que se pueden alquilar este tipo de locales a la competencia. Además, Inditex sigue ganado. Tras desembolsar el dinero, solo amortiza la inversión y, con el tiempo obtiene beneficios.

La revolución lowcost

La tienda de Primark en la Gran Vía de Madrid es un verdadero fenómeno. No solo es uno de los puntos de venta más grandes de la cadena en España, sino que también es un lugar que atrae a una multitud diversa de compradores ávidos de tendencias a precios asequibles. Con más de 12.000 metros cuadrados de espacio comercial distribuido en varios niveles, esta tienda es una experiencia en sí misma.

Lo que hace que Primark sea único es su enfoque en la moda asequible. En un momento en que la moda rápida a menudo se asocia con prácticas insostenibles, Primark ha logrado mantenerse a la vanguardia en términos de tendencias de moda sin comprometer sus precios bajos. La tienda de la Gran Vía es un testimonio de esta filosofía: ofrece una amplia gama de ropa y accesorios para hombres, mujeres y niños, todo a precios que se ajustan al presupuesto de cualquier persona.

Uno de los aspectos más notables de la tienda de Primark en la Gran Vía es su capacidad para mantenerse al día con las tendencias de moda. Los escaparates, abiertos en la gran entrada de la tienda, cambian constantemente y muestran las últimas colecciones de la marca.

Además de la moda, Primark también se ha ganado una reputación por su sección de hogar. La tienda ofrece una variedad de artículos para el hogar, desde ropa de cama y toallas hasta decoración y utensilios de cocina, en muchas ocasiones aprovechando la viralidad de productos en TikTok. Esto hace que la tienda sea un destino de compras completo para quienes desean dar un toque de estilo a sus hogares.

Como destino destino de compras que combina moda, asequibilidad y estilo Primark ofrece una experiencia de compra emocionante para personas de todas las edades y gustos, y su compromiso con la sostenibilidad muestra una preocupación genuina por el bienestar del planeta.