España entra en la sexta semana de confinamiento. Los ciudadanos continúan recluidos en sus hogares y, sin duda, quedan algunos meses por delante para que recuperen lo que, hasta ahora, consideraban que era ‘la normalidad’ del día a día.

Durante estas semanas se ha puesto de manifiesto que el Covid-19 ha modificado los hábitos de consumo a la hora de comprar productos de primera necesidad, también las rutinas y la forma de relacionarse, sin embargo, hay conductas que van más allá, que son más íntimas y que también han cambiado debido a la propagación de la pandemia. Hablamos del sexo.

Tanto se han visto alteradas las vidas sexuales de los ciudadanos que hasta el Ayuntamiento de Nueva York ha publicado en estos días una guía con consejos básicos para mantener relaciones sexuales durante el periodo de confinamiento.

La industria del sexo que está en quiebra

Se acabaron los rollos de una noche. También se han acabado las reuniones Tuppersex, aquellas en las que un grupo de mujeres se sentaban a debatir sobre sus vidas sexuales y abrían ventanas a nuevas experiencias a través de las risas y la adquisición de juguetes eróticos. Las conductoras de estos espacios no tienen ahora trabajo.

Tampoco están abiertos los sex-shops o las saunas, tan transitadas en el centro de Madrid. Lugares de encuentro para amantes o simplemente para disfrutar de un momento de relax. También han cerrado los locales de swingers o de intercambios de pareja y cualquier otro en el que pudieran practicarse actividades sexuales.

Pero no sólo se trata de lugares o de actividades que para muchos pudieran resultar ‘cotidianas’, las medidas de distanciamiento social también afectan a la industria del cine para adultos, el porno, que este año registra sus peores cifras.

A nivel global la industria de cine porno generó en 2019 unos beneficios de alrededor de 9 billones de dólares, es decir, unos 8.275.862 millones de euros. Este año se estima que apenas se llegue a los 1.000.000 millones de euros en todo el mundo. ¿Por qué?

El coronavirus ha paralizado del Valle de San Fernando, (California), considerado la Meca del cine porno, que ha colgado el cartel de ‘closed’, que significa cerrado. Y como ha ocurrido en Estados Unidos, en el resto del mundo, los rodajes se han paralizado sine die. Cientos de miles de actores y actrices de este estilo cinematográfico buscan ahora alternativas para sobrevivir durante estos meses.

“Canales en streaming y reediciones de la época de oro del porno, así se está sobreviviendo”, explica a ElPlural.com el actor porno Drake, que es un nombre artístico. “Está todo parado. Yo funciono como autónomo pero ni siquiera me he atrevido a pedir la prestación extraordinaria. Así que, recurres a internet, los shows por webcam para sobrevivir. Damos el año por perdido, no creemos que se pueda rodar este año”, continúa explicando a este periódico.

Concretamente en España cerca de 3.000 personas se dedican de forma profesional o semi-profesional a esta industria, que les supone unos ingresos de entre entre 40 y 300 euros por escena, dependiendo de la experiencia y la trayectoria cinematográfica con la que cuenten. Sin embargo, de la noche a la mañana todos ellos han perdido el 100 por cien de sus ingresos.

De hecho, tal y como asegura Drake, no se puede vivir de los shows por webcam con los que se gana alrededor de 30 euros por conexión. En España, a diferencia de otros países, se suele pagar por número de personas conectadas y no por número de horas dedicadas a la actividad profesional. Además, comenta, para pagar a estos actores y actrices se emplea la criptomoneda -el token- que, “un día puede ser que esté muy bien situado en el mercado global y otro que se hunda. En España se ha gestionado muy mal. Ahora mismo nos encontramos con varias trabas: una sociedad conservadora e internet, que hace mucho daño a la industria del cine”. 

En este contexto, los actores y actrices también acusan la cancelación de los grandes eventos relacionados con la industria del cine para adultos como la Adult Video News Awards, que se celebra anualmente en Las Vegas y en la que se reúnen más de 50.000 personas. Se trata de eventos que motivos sanitarios se han aplazado sin fecha concreta, con las consecuentes pérdidas económicas que ello conlleva.

Las ventas de juguetes sexuales online

Sin embargo, siempre hay quién sabe sacar partido de los momentos de crisis. La venta de juguetes sexuales online es la otra cara de la moneda de la industria del sexo. De hecho, algunas empresas como Womanizer, la primera en lanzar al mercado el famoso Satisfayer, afirma que las ventas de juguetes sexuales durante el primer trimestre del año han superado todas sus expectativas mientras que, Dildo King, empresa de accesorios sexuales ubicada en Berlín, señala que las ventas de este tipo de juguetes han aumentado en un 87 por ciento desde que se anunciaran las restricciones.

En Italia, primer país europeo en padecer el fuerte impacto del Covid-19, la demanda del succionador del clítoris creció un 60 por ciento. En Hong Kong se dispararon las ventas en un 71 por ciento. En Dinamarca, la venta de juguetes sexuales se ha duplicado en el último mes y en Nueva Zelanda los pedidos se triplicaron el segundo día del confinamiento. Por otro lado, en España, la compra online de juguetes sexuales ha aumentado en un 30 por ciento en el mes de marzo.

Abril, aún es joven y las páginas web dedicadas al porno lo saben. De hecho, Pornhub, la plataforma pornográfica más grande del mundo, valora en su último informe del mes de abril cómo “el tráfico (de vídeos para adultos) mundial sigue siendo mucho mayor de lo que era antes de que la pandemia se extendiera por todo el mundo”. El aumento máximo del 24,4 por ciento tuvo lugar el 25 de marzo después de que la plataforma creciera una versión Premium de sus contenidos para “alentar al distanciamiento social”. De hecho, el propio informe detalla como el consumo de este tipo de vídeos ha caminado de forma paralela al avance del virus por el mundo: “el tráfico comenzó a aumentar antes en Europa que en otras partes del mundo, a medida que el virus comenzó a extenderse”, detalla. Lo cierto es que, la plataforma espera superar con creces las cifras récord del pasado año 2019 en el que se alcanzaron las 42 mil millones de visitas a la página.

Por otro lado, y dejando (o no) de lado el cine para adultos, destaca, que otra de las industrias  de beneficiadas por la pandemia es la de los fabricantes profilácticos. De hecho, Ritex, uno de los principales productores de preservativos de Alemania, asegura que la venta de condones y lubricantes se ha duplicado durante el pasado mes de marzo, en comparación con el mismo mes del año anterior. Sin embargo a pesar del incremento en la venta de preservativos la incertidumbre está ahí: ¿Habrá, o no, en cuestión de 9 meses un nuevo ‘baby boom’?