El Gobierno ha aprobado el tope al precio del gas natural para la generación eléctrica en los 40 euros por megavatio hora -la denominada excepción ibérica- en el Consejo de Ministros extraordinario celebrado este viernes. La vicepresidenta tercera y ministra para la Transición Ecológica y Reto Demográfico, Teresa Ribera, ha celebrado el acuerdo ratificado entre España y Portugal con Bruselas para abaratar el recibo de la luz, una medida que ahora se plantea tomar toda Europa, y que ya se notará en la factura de junio.
"Una medida que permitirá abaratar el recibo de la luz a todos los españoles", tal y como comenzaba su intervención la ministra portavoz, Isabel Rodríguez, asegurando que beneficiará a todo tipo de consumidores: familias, empresas, autónomos o industria.
Ribera ha explicado que el tope del precio del gas se materializará en un primer momento en los 40 euros/MWh hasta llegar a los 48,8 euros/MWh de media, siempre en el mercado mayorista de la electricidad, durante los doce meses en los que la medida estará vigente, con una "protección especial". Las previsiones del Gobierno pasan por conseguir una rebaja "inmediata" de la factura de los consumidores domésticos del 37% y del 70% en el caso de los consumidores industriales a partir de la entrada en vigor. Además, la ministra ha avanzado que este tope se materializará según se revisen los contratos de los consumidores domésticos.
El tope al precio del gas situará el precio de la electricidad en los 130 euros/MWh en el mercado mayorista, frente a los 210 euros/MWh de este primer trimestre y los picos máximos de hasta 600 euros de los últimos meses. Sin embargo, ese no será el precio final, sino que "habrá que sumarle los elementos que correspondan en cada una de nuestras facturas", ha explicado la ministra, en clara referencia al pago de impuestos y costes fijos.
El tope se notará en la factura de junio
El tope al gas entrará en funcionamiento previsiblemente este domingo, tras su publicación en el Boletín Oficial del Estado (BOE) este sábado. Esto supone un ligero retraso de dos semanas después de la intención inicial del Ejecutivo, que esperaba que la medida entrara en vigor a principios de mayo. Ha sido el lunes de esta semana cuando España y Portugal han recibido el visto bueno a la medida, tras ratificar un primer acuerdo con Bruselas la semana pasada.
El acuerdo ratificado con Bruselas está en línea con la decisión del Consejo Europeo del 24 y 25 de marzo, es compatible con el tratado y los reglamentos y permite poner en marcha un mecanismo temporal a los dos países de la Península Ibérica. Una medida que permita abaratar el precio de la electricidad y dar cobertura durante el próximo invierno.
"Somos un país referente en el contexto europeo", ha celebrado la ministra portavoz, que ha puesto en valor el papel el "liderazgo de Pedro Sánchez" y el "cambio estructural" en la política europea, con España y Portugal como pioneros en una medida que ahora quiere aprobar Bruselas a nivel comunitario. De hecho, esta medida está estudiándose en Europa con el objetivo de limitar el precio del gas ante la amenaza por el suministro procedente de Rusia.
Ribera: "Nos beneficia a todos"
Para Ribera, se trata de una medida para que "no paguen los mismos". "Por primera vez este Gobierno progresista ayuda a los más vulnerables. Tiene como finalidad ayudar a la industria y los consumidores energéticos para que nos beneficie a todos", ha explicado en la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros extraordinario.
El tope al precio del gas incluye también una minoración de los beneficios para las eléctricas, "que no supone que tengan pérdidas, sino que seguirán teniendo beneficios", ha asegurado la ministra. Ribera ha criticado duramente el comportamiento de estas compañías y especialmente las declaraciones de Ignacio Sánchez Galán, presidente de Iberdrola, llamando "tontos" a los consumidores acogidos al mercado regulado, ante las que reconoce haber sentido "un profundo bochorno".
La responsable de energía ha pedido a las eléctricas mejorar sus ofertas del mercado libre, especialmente en un momento de altos precios de la energía y pide al sector no jugar con el lenguaje. "Se mantiene el ahorro neto de las compañías", ha ratificado la ministra en base a los resultados económicos publicados esta semana.
