La polémica se ha desatado en las redes sociales después de que Farfetch, empresa de artículos de lujo, anunciase su nuevo producto. No es para menos, ya que, la compañía portuguesa ha lanzado un nuevo artículo que ha escandalizado a los usuarios: bridas. Farfetch "emula a Balenciaga", que ya lanzó unas bolsas similares a las de Ikea a precio de oro, y comercializa unas pulseras y anillos a base de bridas que, tan solo, cuestan 600 euros.

“A mí me parece bien. Estafar a los pijos no solo es justo, sino legítimo”, declaraba un usuario a través de redes sociales. Esta es la línea argumental más seguida por los internauras de redes que parecían adelantarse a lo que más tarde conoceríamos: los artículos a base de bridas están agotados. “Madre mía, ya no saben que hacer para estafar a los ricos”, ha declarado un internauta, perplejo por el anuncio de la empresa portuguesa.

Lo más sorprendente, no obstante, no es el nuevo lanzamiento de la compañía, sino que la línea de accesorios ya esté agotada. No quedan existencias de pulseras, a 575 euros, ni de anillos (375 euros), pero todavía se puede acceder a una joya que emula a las bridas, pero sin ser del material característicos de este elemento de sujeción. Para aquellos deseosos de obtener un artículo de esta colección, aún está disponible la versión en plata del anillo, que simula una brida anudada a dos dedos, pero conformada por metal y con un coste de unos 480 euros.

Por el momento, la web no parece haber sufrido el escarnio recibido a través de redes sociales o, quizás, incluso ha fomentado la adquisición de su nueva colección. Ventas a parte, Farfetch no ha podido evitar las comparaciones con Balenciaga, empresa que cuenta en su catálogo con un bolso similar a una bolsa de basura por 1.700 euros y con una bolsa azul con asas por el mismo precio.

“Cada día más fan de los troleítos que le meten a los ricos”, se ha jactado un usuario; al que han acompañado otros muchos con mensajes similares. “Voy al chino a por bridas y me voy a poner a estafar pijos por Wallapop” o “Ojo que en mi garaje tengo la jubilación asegurada” han sido algunos de los mensajes que han circulado a través de Twitter. Por el momento, la empresa no ha querido pronunciarse, pero mantiene el producto en su web, aunque agotado.