Años tras año, se afronte un periodo de crisis o uno de bonanza, el número de millonarios crece en España. Pese a que ya son 831 contribuyentes los que superan una riqueza neta de 30 millones, casi el doble de los 443 registrados en 2012, esta población minoritaria reniega de repartirse por el territorio nacional y se encuentra guetificada en Madrid. Allí, Isabel Díaz Ayuso se ha encargado de crear un hogar acogedor para los más ricos, exento de pagar el impuesto de patrimonio.  En 2021, último curso con datos disponibles, la presidenta de la Comunidad perdonó 1.212 millones de euros a 524 multimillonarios.

Es posible que los datos del año 2022 desprendan un éxodo hacia tierras andaluzas, donde el moderado de Juanma Moreno Bonilla, más allá del ataque contra la educación y la sanidad públicas, también ha copiado la bonificación fiscal del 100% sobre el impuesto de patrimonio. Hasta entonces, los más ricos se refugian en Madrid a la espera de que se abran otros caminos hacia paraísos fiscales. En 2021, tan solo el 37% (307 personas) de personas con riquezas superiores a los 30 millones pagaron el impuesto de patrimonio, mientras el 63% restante se libro de hacerlo por tener su residencia fiscal en Madrid.

La contribución que supuso en 2021 el impuesto de patrimonio asciende hasta los 1.352 millones de euros, cantidad cercana a los 1.212 millones de euros perdonados en la autonomía liderada por Ayuso, según los datos publicados por la Agencia Tributaria. Esta figura impositiva tiene una naturaleza nacional, pero las CCAA tiene cedida su gestión y cuentan con capacidad para aplicar bonificaciones y deducciones. Lo recaudado va a las arcas públicas del Estado, a las que Madrid decidió hace años aportar cada vez menos, en favor de los más ricos y en detrimento de los más pobres.

Si eres rico te libras

Las grandes fortunas que atesoran más de 30 millones de euros no son las únicas que se han librado de pagar el 100% de sus impuestos. Los datos de la Agencia Tributaria desprenden que de los 231.300 contribuyentes que deben abonar este gravamen, 201.700 lo hicieron. Casi 30.000 se libraron de hacerlo. Además, siguiendo los tramos de patrimonio, parece que cuánto más se atesora, más fácil es librarse.

Un total de 8.300 personas declararon que en 2021 contaban con una riqueza neta de entre 6 y 30 millones de euros. De estos, solo pagaron el impuesto el 50%. De los 63.400 ricos que declararon tener entre 1,5 y 6 millones, el 80% (51.000) abonaron su tributo correspondiente. Por último, aquellos con un patrimonio de entre 300.000 y 1,5 millones de euros pagaron casi en su totalidad, 146.000 de 153.700, el impuesto.

Es importante destacar que para pagar este impuesto hay que poseer bienes cuyo valor común supere los 700.000 euros y del cálculo de este patrimonio quedan exentos, es decir, no suman, múltiples bienes: la vivienda habitual hasta 300.000 euros, el ajuar doméstico, los derechos derivados de la propiedad intelectual, el patrimonio empresarial y profesional o la participación en determinadas entidades u objetos de arte y antigüedades, entre otras cosas.

En el conjunto de las 15 comunidades con el régimen común, del que quedan excluidas País Vasco y Navarra, las bonificaciones y deducciones autonómicas perdonaron a los más ricos de España 1.226 millones de euros. De esta abultada suma, 1.212 millones fueron regalados en Madrid, lo que supone el 98,85% del total.

En sentido opuesto, de los 1.352 millones de euros recaudados a través del gravamen de patrimonio, el 43% (casi 600 millones) procedió de Cataluña. El siguiente territorio en la clasificación es la Comunidad Valencia, de donde afloraron 188 millones de euros, y en tercera posición aparece Andalucía con 107 millones de euros ingresados que podría desaparecer de las cuentas de 2022 por la genuflexión de la Junta a los ricos.

El hartazón es generalizado entre las administraciones que si se encargan de que sus contribuyentes más ricos colaboren a unas cuentas con las que luego se sufragan los servicios públicos. La competencia desleal de Madrid y Andalucía, paraísos fiscales de interior, atrae a las grandes fortunas, cuyo único arraigo es económico, al interior de sus fronteras. La Comunidad Valenciana y Murcia han anunciado, según se refleja en los acuerdos de Gobierno de PP y Vox, que seguirán el mismo camino. Los multimillonarios no pagan impuestos donde gobierna las extrema derecha, vigilen sus carteras.