El volcán de Cumbre Vieja, en la isla de La Palma, ha pasado de un valor dos que tenía hasta ahora a tres, en una escala de hasta ocho. Esto es lo que ha resuelto este sábado el Comité Científico encargado de su evolución tras evaluar la magnitud de la erupción, que cumple ya dos meses

Sin embargo, esto no supone que exista una mayor explosividad o que haya alguna variación en el mecanismo estromboliano del fenómeno natural. Así lo ha explicado en rueda de prensa la vulcanóloga del IGN, Carmen López, que ha recordado que este cálculo se realiza a partir del volumen de material piroclástico emitido.

"Dado que se han superado los 10 millones de metros cúbicos de material piroclástico emitido, se pasa de valor dos a valor tres, y no implica que haya cambiado el mecanismo eruptivo, que sigue siendo fisural efusivo estromboliano", ha dicho textualmente. Por tanto, no hay cambios en la explosividad, que mantiene las mismas características que hasta el momento.

Tres frentes activos

En cuanto a la evolución del volcán, todavía continúan activas las tres coladas lávicas que había en la jornada de este viernes aunque este sábado presentan una menor actividad. Según el Pevolca, el frente que discurre entre las zonas cuatro y siete está ocupando nuevo terreno y ha avanzado 130 metros hasta la mañana de este sábado.

Por su parte, siguen activos varios centros de emisión con una actividad variable tanto de piroclastos y gases como de lava. A primera hora de la jornada la altura de la columna eruptiva medida era de unos 3.200 metros. La sismicidad continúa localizándose en las mismas zonas y el tremor sigue en un nivel bajo.

Además, según los últimos registros, se estima que en total hay cerca de 1.050,95 hectáreas de superficie afectada, 2,94 más que en la última actualización.