El equipo médico encargado del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, hospitalizado por coronavirus ha informado este domingo de que podría ser dado de alta este mismo lunes del Hospital Walter Reed de Bethesda, Maryland, en el que ingresó el viernes.

El doctor Brian Garibaldi ha explicado que se ha suministrado una segunda dosis del antiviral remdesivir este sábado y que "hoy se siente bien". "Ha estado de pie y paseando. Nuestro plan para hoy es que coma y beba y esté fuera de la cama", ha explicado Garibaldi en rueda de prensa.

"Si sigue hoy con buen aspecto y sintiéndose bien esperamos que pueda recibir el alta mañana mismo y trasladarse a la Casa Blanca para seguir con su tratamiento", ha añadido.

También ha participado en el acto con la prensa el médico personal de Trump, Sean Conley, quien ha destacado que el paciente sigue "mejorando", pero, como en cualquier enfermedad, "hay altibajos".

"Durante esta enfermedad el presidente ha sufrido dos episodios de caída pasajera de la saturación de oxígeno. Debatimos los motivos y si teníamos que intervenir y el equipo decidió basándose en el progreso del diagnóstico inicial que el suministro de dexametasona", ha apuntado.

La dexametasona es un esteroide, un tipo de medicamento que ha demostrado una relativa eficacia en pacientes de COVID-19, la enfermedad provocada por el nuevo coronavirus.

Este sábado, en medio de la polémica sobre su estado de salud, y después de que fuentes de la Casa Blanca indicaran que la salud del Presidente era "muy preocupante", Trump publicaba un vídeo en su cuenta de Twitter afirmando que se encontraba "mucho mejor" y que volvería pronto a la campaña, 

En la grabación se refería a los tratamientos recibidos como "milagrosos" , aunque señalaba que "el próximo par de días" sería clave para ver cómo se desarrollaba su enfermedad.

El mandatario también agradecía a los líderes internacionales sus buenos deseos, así como a los miembros de su partido y a sus rivales demócratas.