Apenas han pasado 24 horas desde el úlitmo tiroteo y se han registrado dos prácticamente simultáneos. El primero tuvo como escenario un cementario de Graceland (Wisconsin), a 48 kilómetros al sur de Milwaukee, y dejó "múltiples" muertos y heridos. El segundo, a unos 600 kilómetros, en una iglesia de la localidad de Ames (Iowa), ha acabado con la vida de dos mujeres.
La Policía dio la voz de alarma a las 14:26 de este pasado jueves tras recibir la llamada de auxilio desde el cementerio de Graceland, en Racine. El tiroteo tuvo lugar durante la celebración de un funera. El sospechoso, sobre el que se desconoce su paradero e incluso su estado, ha dejado a sus espaldas "múltiples" muertos. Las autoridades no han precisado en este momento el número de víctimas.
Los agentes sí han advertido a los ciudadanos de la localidad que eviten la zona, además de iniciar las investigaciones pertinentes para esclarecer el origen del tiroteo y su autoría. Además, han agregado, a través de un escueto comunicado en redes sociales, que la escena del crimen "sigue activa" y se están siguiendo todas las pistas disponibles.
Tres muertos más en Iowa
Cinco horas más tarde, un hombre ha matado a dos mujeres y más tarde se ha suicidado la noche de este jueves en el aparcamiento de la iglesia 'Cornerstone' en la localidad de Ames, en el estado de Iowa, en el segundo tiroteo de la jornada en Estados Unidos y tras la solicitud del presidente estadounidense, Joe Biden, al Congreso para que se prohíban las armas de asalto en el país.
El tiroteo se ha producido poco antes de las 19.00 horas (hora local) y cuando han llegado los agentes al lugar de los hechos han encontrado a dos mujeres y un hombre muertos, ha confirmado el jefe de Policía de la ciudad, Nicholas Lennie, tal y como ha informado la cadena estadounidense NBC News. El hombre ha sido identificado como el principal sospechoso y no hay ninguna amenaza para la comunidad, ha agregado Lennie.
Así, Lennie ha dicho que los testigos que han llamado a la Policía han asegurado que un hombre armado en el aparcamiento de la iglesia había disparado a dos personas.
El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, ha comparecido a última hora de este jueves en la Casa Blanca para solicitar al Congreso que se prohíban las armas de asalto en el país y se establezcan leyes más estrictas para controlarlas.
Este suceso se produce un día después de que un hombre armado matara a su cirujano y a otras tres personas en el Hospital Saint Francis de Tulsa, en el estado de Oklahoma. El 24 de mayo otro tiroteo dejó al menos 21 personas fallecidas, 19 de ellas niños y dos adultos, en la escuela de primaria Robb de la ciudad de Uvalde, en el estado de Texas, en el sur de Estados Unidos.
