Muchos ya advirtieron la debacle que se le avecinaba a Telecinco con la reestructuración de ofertas de su parrilla televisiva que la nueva cúpula directiva está llevando a cabo. La cadena lleva ya mucho tiempo cotizando a la baja, pero su hundimiento va cada vez a peor. Los espectadores le dan la espalda y el viernes 4 de agosto de 2023 firmó su peor día en audiencias desde 1990, apenas obtuvo un 7,9% de cuota de pantalla, un resultado estrepitoso para un canal que encadenó muchos años siendo líder indiscutible.

El bajón de audiencias durante el verano era un fenómeno habitual que venía repitiéndose en los últimos años, pero lo que está sucediendo este mes de julio, en el que ha quedado relegada a la tercera posición por detrás de Antena 3 y La 1, es el súmmum de la desacertada gestión empresarial. Un sorpaso inédito el de la televisión pública que no se producía desde hace aproximadamente una década.

Si algo salvaba los fracasos de la cadena principal de Mediaset en veranos anteriores era tener las 4 o 5 horas de Sálvame en la franja vespertina para contrarrestar la mala acogida de muchas de sus ofertas en el prime time. El formato de La Fábrica de la Tele suponía un verdadero pulmón para la parrilla diaria de la cadena, que servía especialmente los meses estivales.

Telecinco relegada a la tercera opción

Según los porcentajes obtenidos del informe de la consultora Dos30' elaborado en base a los resultados dados por Kantar Media, Telecinco, con un 9,3% de share, ha bajado 1,7 puntos respecto a junio de 2023 y 3,8 en comparación a julio del pasado año. Por su parte,  La 1, con un 9,9%, mejora 0,2 puntos en comparación a junio de este y 1,4 en relación a julio de 2022. Finalmente, Antena 3 lidera, a pesar de caer 0,7 puntos en relación a julio del año anterior, con un 12,9% de cuota. 

El sorpaso de la cadena principal del ente público a Telecinco era impensable hace poco, pero, gracias al gran éxito del relanzamiento del Grand Prix, logró superar al de Mediaset en julio con un 9,9% de share frente al 9,3 de Telecinco, que está sumida en una auténtica crisis de audiencias.

Aunque estamos en pleno ecuador del verano, las cadenas de televisión han estado preparado durante las últimas semanas lo que será su nueva temporada. Telecinco, arropada por la nueva Mediaset, publicaba este jueves 3 de agosto un anuncio en formato vídeo en el que se pueden ver sus 10 apuestas más ambiciosas con las que pretende recuperar audiencia. Dicho avance ha generado multitud de dudas y críticas.

Los fracasos de este verano en Telecinco

Nada ha funcionado este verano en Telecinco, una batería de fracasos a los que vamos a ponerles nombre para que seamos conscientes del desastre: La traición, la ficción turca cancelada tras solo un día desde su lanzamiento al marcar un paupérrimo 6,8% de share. Me resbala, la vuelta del formato de humor que no llega ni al 10%. Vaya Vacaciones, el reality veraniego de los jueves con Luján Arguelles que hace la mitad del share que Supervivientes. La última noche, el sustituto del Deluxe que anota unos datos dignos de cancelación. La vida sin filtros presentado Cristina Tárrega, que el pasado sábado tenía menos audiencia que un concierto de Camela con 647.000 asistentes, y Allá tú, que dentro del desastre es el menor de sus problemas.

Esos son los batacazos nocturnos, aunque el verdadero drama está en las tardes, una franja en la que Telecinco siempre lograba algún liderazgo y en la que ahora se ven desterrados a la intrascendencia más absoluta. Todo comenzó con el nuevo culebrón de Lydia Bosch, Mía es la venganza, que hizo honor a su título en boca de Jorge Javier Vázquez y se fue por la puerta de atrás, ni emitiéndose sin publicidad pudo sobrevivir un mes en antena. Por su parte, el magacín diario Así es la vida a duras penas supera el 8% de cuota.

Telecinco se enfrenta así a un mes de agosto que se le hará larguísimo con esta serie de ofertas que hace aguas en casi todas las franjas y días de la semana. La cadena está marcando este verano sus peores registros de audiencia desde su nacimiento y nada hace pensar en una mejoría a corto plazo.