The Economist ha dedicado en sus páginas un extenso artículo a las elecciones regionales de la Comunidad de Madrid, que se celebrarán el próximo 4 de mayo. El periódico británico asegura que su convocatoria está "sacudiendo" a la política nacional debido a la campaña "polarizada" que afecta a partes iguales a los partidos de derecha como de izquierda.

La prensa británica se hace eco del "intento fallido" de Ciudadanos, liderado por Inés Arrimadas, de derrocar al gobierno popular de la Región de Murcia, en primer lugar, que detrás le siguieron la Comunidad de Madrid y Castilla y León. De esta manera, 'The Economist' define con contundencia a la formación naranja como un “partido centrista en declive”, a la vez que advierte que su fin puede estar a la vuelta de la esquina.

Señalamientos hacia Díaz Ayuso y Casado

Atendiendo a la situación de la capital, el artículo concreta que la comunidad es el “buque insignia del PP”, ya que ostenta el poder desde 1995, actualmente dicha responsabilidad sigue recayendo sobre los hombros de Isabel Díaz Ayuso. Asegura así que “sus políticas de impuestos bajos” y “regulación ligera” han ayudado a que “Madrid tenga uno de los crecimientos económicos más rápidos”.

Esta situación económica estaría respaldada en los recortes que la salud pública ha tenido que sufrir en consecuencia. En la misma línea, señalan a Ayuso como la más "decidida" ante mantener la hostelería abierta, lo que habría supuesto un empeoramiento de la situación de la pandemia en Madrid, aunque también reconoce que "la ha convertido en la oponente más visible de Sánchez”.

Asimismo, alerta sobre las nuevas alianzas que la presidenta regional podría forjar con Vox para mantener su puesto: “Su entrada en un gran gobierno regional por primera vez sería un gran problema para Casado”, escribe.

Un vistazo a la estrategia de Unidas Podemos

El semanario británico también hace referencia a la estrategia política de Unidas Podemos en relación a los comicios madrileños, ya que su líder, Pablo Iglesias, ha abandonado recientemente su acta de diputado y su cargo en el Gobierno Central para enfretarse cara a cara contra Ayuso. “Podemos creció rápidamente a través de alianzas, que se han desmoronado”, argumenta, asegurando que suvoto dependerá del resto de partidos de izquierda.

“Iglesias es mejor activista que administrador. Su coalición con Sánchez ha sido incómoda. Ha pedido políticas intervencionistas en el mercado laboral y la vivienda, y se alineó con los separatistas catalanes y los ex terroristas vascos”, expone The Economist, argumentando en la misma medida que Yolanda Díaz, que ocupará su lugar, es más "disruptiva".

Para finalizar, lanza un serio pronóstico sobre el futuro de Iglesias y su impacto en la política española: “Al optar por dedicarse a liderar su partido, Iglesias tendrá más libertad para atacar al gobierno. Pero es casi seguro que tendrá menos poder. Como resultado, muchos españoles, incluido Sánchez, respirarán mejor”, concluye.