Como ya es habitual, las elecciones presidenciales no se convierten no solo en una guerra política entre partidos y candidatos, sino también en una guerra mediática. Por ello, las entrevistas y debates electorales se convierten en uno de los momentos claves de la campaña. Previamente a las votaciones del 23 de julio de 2023, Ana Rosa Quintana recibía, en fechas diferentes, a Alberto Núñez Feijóo y a Pedro Sánchez en su programa. Aunque la presentadora anunció otro encuentro con el presidente del Partido Popular para el 24 de julio, el gallego nunca llegó a presentarse. 

En un encuentro con los medios con motivo del final de 'El Programa de Ana Rosa', la presentadora era preguntada sobre si había pedido entrevistas con los dos principales candidatos a ocupar la presidencia. Quintana tuvo clara la respuesta: “No, sólo a Feijóo porque va a ganar". En la misma conversación aseguraba que "España siempre vota bien". Tras las elecciones, la victoria del candidato del PP no fue tan rotunda, dejando con un sabor agridulce al partido. Sin embargo, la presentadora decidía abrir el programa con la siguiente frase: "Enhorabuena Alberto Núñez Feijóo, ganador de las elecciones generales, y enhorabuena Pedro Sánchez, perdedor de las elecciones generales". 

Pese a la victoria, el candidato gallego decidió no presentarse en el plató de Unicorn Content y, en su lugar, mandó a Cuca Gamarra. La secretaria general del Partido Popular era la encargada de conectar con el programa de Quintana para dar la cara tras los resultados de las elecciones. Aunque Quintana no mencionó en ningún momento por qué Feijóo no se pronunciaba públicamente ante sus micrófonos. 

 

La vuelta de Feijóo a Telecinco: un alegato contra Sánchez

Tras el plantón de Feijóo a Ana Rosa Quintana, el político decidía reaparecer en otro programa de su productora Unicorn Content: 'La mirada crítica'. En esta ocasión, el gallego aceptaba la oportunidad de hablar ante la audiencia más de un mes después y ya como candidato a la Presidencia del Gobierno. Ana Terradillos recibía a Alberto Núñez Feijóo con gran estusiasmo: "¿Sabe usted que es el primer político que viene a mi plató de 'La mirada crítica'? Y estoy encantada además", decía. Después de que el candidato a la Presidencia asegurara que era un "honor", ambos se deshicieron en agradecimientos. 

En primer lugar, se manifestó sobre la reducción de la condena a uno de los miembros de "La Manada", volviéndose a manifestar en contra de la ley del "solo sí es sí": "Lamentablemente estaba dentro de lo previsible porque los jueces lo que tienen que hace es aplicar las leyes. Cuando las leyes están mal hechas... Cuando se toma de forma frívola temas tan importantes como es una violación o un abuso sexual y cuando además se le advierte al Gobierno de que está en un error y que no se puede aprobar la ley y el Gobierno prosigue, insiste y la aprueba pues produce efectos", sentenciaba. Acto seguido, calificó al "señor Sánchez" como una persona que "escucha poco, le sobra soberbia y le falta humildad para aceptar errores". 

Además, el candidato opinó sobre el posible apoyo de Carles Puigdemont al Partido Socialista ante una posible investidura de Pedro Sánchez: "Mire, lo que tengo claro es que Pedro Sánchez no puede ser presidente del Gobierno si Junts y el señor Puigdemont no le hacen presidente del Gobierno. Primero porque perdió las elecciones y segundo porque tiene menos apoyos que yo. Por lo tanto, la única posibilidad de que el señor Sánchez sea presidente del Gobierno es si Puigdemont acepta hacerle presidente del Gobierno. Y esto obviamente es una anomalía democrática, los países socios en la Unión Europea no pueden entender que España dependa de una persona buscada por la Justicia española y que el presidente del Gobierno en funciones opte a volver a ser presidente después de perder unas elecciones si Puigdemont le hace o le acepta como presidente del Gobierno", repetía.  

Por otro lado, ensalzaba los valores del Partido Popular: "Nosotros tenemos un objetivo y un encargo. El objetivo como partido es: el que gana las elecciones, como siempre en 47 años de democracia, preside el Gobierno. El encargo que tengo de Su Majestad el Rey es conseguir una investidura. Por tanto, si hay partidos políticos que quieren hablar con nosotros... Hemos hablado con partidos políticos. Lo que pasa que hemos dicho que no, así no podemos aceptar requisitos ni condiciones porque ese requisito y esa condición, además de que entendemos que es ilegal, es indigno y es reprochable moral y éticamente, y no vamos a aceptar negociar el Estado con una parte de partidos políticos que representan a una minoría", argumentaba.