Ante la polémica suscitada, Amorós borró el tuit y pidió perdón, exigiendo al mismo tiempo que se retirasen también los mensajes ofensivos hacia su persona. Justificó su comentario diciendo que no sabía a qué correspondía el número pese a que durante buena parte del debate se aludió a la cifra en la tribuna.
Esta misma diputada ya fue muy criticada la semana pasada después de que Las Provincias la pillara con las réplicas por escrito a debates que todavía no se habían producido.