Tal y como publicó este medio, La Gaceta, el periódico que edita Intereconomía, pasa por horas críticas. De hecho, los medios ramblalibre.com y tercerainformacion.com se han hecho eco del despido de 18 empleados de la plantilla. En estos momentos, tal y como afirman los digitales, en La Gaceta solo quedarían 3 trabajadores.

Si en un primer momento, tal y como publicó ElPlural.com, fuentes de la empresa reconocieron que era probable el cierre de este digital (la edición impresa dejó de publicarse en diciembre de 2013), ahora desde la directiva ni confirman ni desmienten.

¿Crónica de una muerte anunciada?

Aunque el grupo Intereconomía tuvo un hueco en los dominios mediáticos, en el mes de mayo del año 2010 comenzó su declive empresarial. A los rumores de déficit se sumaron los retrasos en los pagos de las nóminas a los trabajadores.

A pesar de que la empresa en un primer momento nunca confirmó la crisis, el abandono de las oficinas centrales del grupo, situadas en el costoso Paseo de la Castellana de Madrid, supuso la constatación del inicio de Expedientes de Regulación de Empleo, además de la desaparición de la edición de ‘La Gaceta’ y el fin de las emisiones en abierto en la TDT.

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Al mismo tiempo, los rostros populares de Intereconomía abandonaron el canal con la correspondiente denuncia a su presidente, Julio Ariza, por el impago de nóminas. Las empresas del grupo resultaron intervenidas. Primero con un procedimiento concursal en la matriz Intereconomía Corporatión y Homo Videns y con posterioridad Intereconomía Radio, Intereconomía Publicaciones e Intereconomía TV, hasta que finalmente era el propio Julio Ariza el que entraba en “concurso de acreedores”.

En la actualidad, sufre una elevada deuda fiscal: 17.676.823 euros, a los que hay que sumar el despido de gran parte de la plantilla. Lo llamativo es que un ‘periódico digital’, que se pueda considerar serio, pueda funcionar con solo 3 periodistas. Está claro que las agencias de noticias dan mucho contenido, pero no es menos cierto que es muy difícil que el trabajo de tres personas sea suficiente para sacar un medio adelante, a no ser que el fin, en este caso, justifique el medio.