La expresidenta de la Junta de Andalucía y secretaria general del PSOE-A Susana Díaz (Sevilla, 1974) aspira a revalidar su mandato orgánico y electoral apelando a la libertad de los militantes y la igualdad de oportunidades y recalcando que la federación andaluza no debe estar tutelada por la dirección federal. Admite haber cometido errores en el pasado, pero también haber aprendido de ellos para el futuro.

EL PLURAL (EP): Resuma los argumentos nucleares del proyecto socialista que usted encarna.

SUSANA DÍAZ (SD): Presentamos un proyecto moderno y renovado para volver a gobernar Andalucía, derrotar a las derechas y arreglar el destrozo que han hecho en estos dos años en nuestra comunidad. Un proyecto autónomo, 100% andaluz, centrado en las personas, para una Andalucía moderna, igualitaria, feminista, digital y verde, que ofrezca oportunidades para todos y todas. Y un partido hecho desde Andalucía, para y por Andalucía.

EP: Sostienen sus adversarios que usted encarna un proyecto personalista y sin capacidad para unir de nuevo al partido. Defiéndase.

SD: Unidos somos más fuertes, es el lema de nuestro proyecto. Un proyecto colectivo, lleno de gente joven y de gente con experiencia, que reúne talento de todo el territorio de la comunidad y cuyo principal objetivo es servir a Andalucía y servir al PSOE. Nunca se consigue algo grande en soledad. Somos muchas y muchos los que formamos parte de este proyecto, cada día más y más ilusionados, y juntos lograremos construir un PSOE más fuerte y cohesionado, en el que la voz de la militancia sea decisiva y sus dirigentes rindan cuenta. 

EP: Haber perdido la Junta de Andalucía aun habiendo ganado las elecciones no es un obstáculo insalvable ante una militancia que, como es lógico, quiere recuperar la Junta. ¿Cómo convencerlos de que puede ser reconquistada por la misma persona que la perdió?

SD: Los socialistas ganamos en 2018 las elecciones, somos el partido mayoritario en el Parlamento y nunca olvidamos el millón de andaluces que representamos. Y desde que soy secretaria general hemos ganado en Andalucía todas las elecciones que se han convocado ya sean nacionales, europeas o municipales. Ésas son mis credenciales. Las derechas gobiernan en la Junta gracias a una carambola con Vox que le dio el gobierno a (Juan Manuel) Moreno Bonilla, a pesar de haber conseguido los peores resultados electorales del PP en la historia de la autonomía andaluza. Los dos años de oposición han sido duros, pero nos han servido para reconocer errores, hacer autocrítica y cambiar. Más de 26.000 iniciativas hemos registrado en el Parlamento en dos años, con problemas y demandas de todo el territorio, el doble de lo que hizo el PP en la legislatura anterior.

EP: Distintos observadores sitúan a Juan Espadas como favorito en esta carrera. ¿Qué le dice su instinto?

SD: Que hay ilusión y esperanza en la militancia del PSOE de Andalucía para decidir en libertad desde, por y para Andalucía. En el PSOE manda su militancia y veo a la gente muy ilusionada y motivada con el proyecto que presentamos y con el que hemos recorrido más de 300 pueblos y ciudades de la comunidad. El PSOE de Andalucía ha sido siempre el corazón que bombea socialismo a toda España. Y la militancia socialista andaluza se ha ganado a pulso su libertad para decidir el presente y el futuro de nuestro partido, igual que sucede en el resto de las federaciones del PSOE.

EP: Si es la ganadora, ¿cuál es la palabra qué repetirá usted en su discurso de esa noche: unidad, renovación, esperanza, futuro?

SD: Andalucía, sin duda. Queremos un partido unido, moderno, fuerte, que dé esperanza a la gente, que trabaje para que tengamos el mejor futuro posible. Pero, sobre todo, representamos un proyecto por y para Andalucía, capaz de devolver el gobierno de esta tierra a la gente, a todos aquellos que tan mal lo están pasando y que han sido abandonados por la insensibilidad e indolencia del gobierno de Moreno Bonilla. Restituiremos los derechos sociales que han sido arrebatados a la ciudadanía por esta derecha, que está en manos de la ultraderecha, y que son mis únicos rivales a batir.

EP: ¿Qué hará si pierde? ¿Habrá un traspaso de poderes tranquilo?

SD: Si gana Luis Ángel gana el PSOE, si gana Juan gana el PSOE, si ganamos nosotros gana el PSOE. Aquí el único adversario está fuera y es la derecha. El resto sólo estamos para ayudar a trabajar por una Andalucía mejor y un PSOE mejor. Siempre escucharé la voz de la militancia y siempre actuaré en beneficio de mi partido.

EP: ¿Cuál cree que es una de sus mayores virtudes? ¿Y si tuviera que destacar una de sus competidores en estas primarias?

SD: Prefiero que sea la militancia la que valore en libertad cada proyecto y cada candidatura. En el PSOE hay mucho talento, y Luis Ángel y Juan son magníficos ejemplos de ello. Si hay algo que he visto en todos y cada uno de los municipios que he visitado es el enorme talento y capacidad que hay en el PSOE de Andalucía. La cantera de nuestro partido es inagotable, y yo me comprometo a contar con los mejores.

EP: ¿El PSOE necesita ser azuzado por un partido ubicado más a la izquierda para despertar de la modorra institucional y ser más valiente?

SD: El PSOE es el partido referente de la izquierda en España y aquí, en Andalucía, es el partido de la inmensa mayoría de los andaluces. Aquí no ha habido tensiones territoriales porque los andaluces y andaluzas se han identificado siempre con el PSOE. Además, es el partido que más ha aportado y apostado por la Igualdad en nuestro país. Todas las grandes conquistas sociales alcanzadas, desde las pensiones hasta el sistema de atención a las personas con dependencia, llevan la firma del PSOE. Llevamos dos años y medios recuperando el diálogo con colectivos sociales, como sanitarios, docentes, autónomos, sindicatos... Y también con otras fuerzas políticas a nuestra izquierda, porque queremos hacer de este PSOE andaluz un partido de banda ancha en el que todos y todas encuentren su lugar.

EP: ¿Debe el PSOE de Andalucía reforzar aún más su vertiente andalucista?

SD: El PSOE de Andalucía es el partido del 28 de Febrero, el partido que se puso al frente del movimiento por la autonomía andaluza que ha supuesto un antes y un después para el desarrollo de esta comunidad y que garantizó la igualdad en toda España. Gracias a Andalucía no hubo españoles de primera y de segunda. Somos el partido que mejor representa a esta tierra, porque somos el que mejor la conoce. En Andalucía hay 785 municipios y el PSOE tiene 807 agrupaciones. Estamos en toda Andalucía, desde Ayamonte (Huelva) a Pulpí (Almería). Socialismo y andalucismo han ido siempre de la mano y deben seguir haciéndolo, y seguir desde Andalucía bombeando socialismo a toda España.

EP: El PSOE de Andalucía cuenta con más de 400 alcaldías, teniendo un poder municipal enorme. Sin embargo, parece que el partido tiene un problema enquistado desde hace años con el voto urbano. ¿Cómo cree que se puede atraer a ese votante de ciudad al PSOE-A?

SD: Con un proyecto actualizado y cercano, que ofrezca oportunidades reales de mejora de vida tanto en las ciudades como en el mundo rural. Lo que la gente espera de su gobierno es muy similar en los dos ámbitos: que la sanidad pública funcione, que haya una educación pública de calidad, y apoyo para que se cree empleo y empresas. Y que la ciudadanía pueda vivir y emprender su proyecto de vida donde desee hacerlo.

Trabajaré para que los andaluces tengan las mismas oportunidades vivan donde vivan y, en el ámbito urbano, para resintonizar con las necesidades y aportar soluciones a retos como el precio de la vivienda, la factura de la luz, la calidad de los servicios públicos o el empleo.

EP: La derecha aventaja a la izquierda en todas las encuestas en Andalucía. En cualquier caso, ¿cree que 'hay partido’ en las próximas elecciones autonómicas? ¿El PSOE puede volver a gobernar Andalucía a corto plazo, desalojando a la derecha de San Telmo?

SD: Hay encuestas para todos los gustos y colores, depende de quién las encargue, pague o patrocine. Fíjese que hace unas semanas hasta un medio de derechas reconocía que los socialistas volveríamos a ganar las elecciones en Andalucía y crecíamos 6 diputados más. Las encuestas no nos distraen. El único sondeo que vale es la calle y la voz de la gente. Ahora, la de la militancia socialista. Y cuando Moreno Bonilla quiera, la que arroje las urnas de Andalucía. Estamos más que preparados para recuperar San Telmo para los andaluces.

EP: Usted siempre fue partidaria del cordón sanitario en torno a Vox. ¿Esa estrategia no les favorece electoralmente? ¿No habría que pensar en integrarlos en el entramado institucional para que dejen de ser un partido antisistema?

SD: ¿Integrar a quien se está aprovechando del sistema democrático para reventarlo? Jamás. El cordón sanitario del que usted me habla funciona en las sociedades más avanzadas de Europa. El ejemplo más claro lo tenemos en Francia, donde todos los demócratas se unen para frenar a la ultraderecha de Le Pen en las segundas vueltas, mientras que aquí en España corren a hacerse la foto de Colón para blanquearla, normalizarla y abrirle de par en par la puerta de las instituciones. Esa foto de Colón tuvo su origen aquí en Andalucía, cuando PP y Ciudadanos claudicaron ante la extrema derecha para amarrar el gobierno de Andalucía y Moreno Bonilla accedió al sillón de presidente con los votos prestados de los herederos del franquismo. Nunca olvido que la irrupción de Vox en Andalucía fue negar nuestra autonomía, insultar y ofender al padre de la patria andaluza, Blas Infante, perseguir la educación en valores y cuestionar la lucha contra la violencia de género. Así actúa esta ultraderecha en la que se apoya Moreno Bonilla.

EP: Por último, a nivel más personal, usted está protagonizando una intensa campaña de primarias recorriendo toda Andalucía, con miles de kilómetros a sus espaldas. Suponemos que para ello es esencial el respaldo de sus familiares y amigos. ¿Cuenta con su apoyo pleno pese a que su dedicación política les quite tantas horas de su compañía?

SD: Es mi pasión, porque nunca me jubilaré de ser socialista y de trabajar por los demás. Pienso, siento y vivo como socialista, llevando a mis hijos al mismo colegio público en el que yo estudié o usando y valorando la sanidad pública. Sé que en esta campaña le estoy quitando horas de dedicación a mi familia, sobre todo a mis dos hijos, Jose, de 5 años, y Rocío, de tan solo 15 meses, pero sé que merece la pena. Hay horas en las que se te hace difícil y los echas mucho de menos, pero espero y deseo que cuando sean mayores puedan decir que su madre formó parte de aquella generación de hombres y mujeres que lucharon por una Andalucía mejor para todos.