El toro embolao propuesto por el Gobierno de Isabel Díaz Ayuso, ese festejo que ya se prohibió en la región hace tres décadas y que ahora, con su ‘rescate’ en la agenda de Sol para 2025 se ha valido de sendas críticas por parte de la oposición de izquierdas, ahora podría tener una vía más de confrontación en los tribunales.
PACMA anunció este lunes que recurrirá judicialmente la nueva normativa taurina elaborada por el Ejecutivo de la Puerta del Sol y planteada en sus presupuestos para 2025 “si no se corrige” antes de que obtenga luz verde definitiva. En este sentido, la formación animalista ha tildado de “despropósito” recuperar este festejo que se centra en una práctica habitual en las escuelas taurinas y en la que se ven involucrados hasta menores de edad.
Desde PACMA también reprochan que se recupere el toro embolao con una tramitación normativa que introduce “espectáculos y festejos taurinos propios de otros ámbitos geográficos” tan sólo para incluirlos en la agenda madrileña. Defienden así que, pese a que la tendencia mundial va encaminada a erradicar el maltrato y sufrimiento animal, a la contra, “el actual Gobierno madrileño pretende ampliar el abanico de espectáculos y festejos taurinos que se pueden celebrar, ampliando a los que son propios o tradicionales de otras comunidades autónomos e, incluso, de otros países. Un disparate que no vamos a consentir”, apremian.
A su vez, hacen el inciso de que esta pretensión, en caso de llevarse finalmente a la práctica, “infringiría el principio de jerarquía normativa” inscrito en el Reglamento estatal, el cual recoge que tan sólo se celebren “espectáculos tradicionales”, séase, continuados. Cabe recordar en este punto que el polémico toro embolao fue prohibido en 1996, bajo el mandato del popular Alberto Ruiz Gallardón.
“La Comunidad de Madrid pretende regularizar las clases prácticas de las escuelas taurinas como espectáculos públicos, pero sin que les sea de aplicación la normativa sobre espectáculos públicos. Esto conlleva, además, a la incongruencia de que la norma, por un lado, prohíbe herir, pinchar o tratar de cualquier modo violento o cruel a las reses y darles muerte en presencia de público en los espectáculos taurinos populares, pero sí permite herir, pinchar, tratar de modo violento y cruel a las reses y darles muerte en presencia de público, cuando se trate de actividades en las que pueden intervenir niños a partir de tan sólo catorce años, como son las clases prácticas”, subrayan los animalistas en un comunicado.
Así las cosas, y en caso de no corregir las “irregularidades” descritas y “contravenciones” del reglamento estatal con respecto a festejos de este calibre, PACMA garantiza que recurrirá el reglamento del Gobierno de Ayuso a los tribunales.
Ayuso premia a los toros y deteriora los museos
Una de las medidas que más polémica ha suscitado en el plano político, también social, de Madrid ha sido la propuesta del Ejecutivo de Ayuso inscrita en sus cuentas públicas para 2025 de recuperar una fiesta taurina que ya se consideraba extinta en la región: el toro embolao. Allá por 1996, según la normativa impulsada por el mandato de Gallardón, ya consideró esta práctica como “maltrato” animal y, por ende, quedó prohibida. Sin embargo, ahora, a partir de la Consejería de Medio Ambiente, Agricultura e Interior de Sol, se abren a modificar el artículo 3 del decreto 112/1996, el cual recoge tanto el toro embolao y el enmaronado.
Pero las medidas taurinas de Ayuso no han quedado en este punto. Para el año que está por entrar, el Gobierno madrileño ha predispuesto 1.104 millones de euros más para desarrollar sus políticas en comparación el ejercicio previo. Una partida presupuestaria que choca con el recorte de casi el 6% que se ha acometido en la cartera de Cultura y que, por ende, ha ido a parar a tauromaquia.
Por primera vez, Díaz Ayuso ha incluido en sus presupuestos una partida de 1,7 millones destinada a la Fundación Toro de Lidia; 200.000 euros más que en 2023. Pese a ello, y en detrimento de otras áreas, las principales pinacotecas de la capital se han quedado sin la subvención autonómica que recibían. Los Museos del Prado, Thyssen y Reina Sofía, los tres emblemas culturales de Madrid son competencia estatal, pero hasta la fecha recibían una subvención directa cada uno de ellos de 150.000 euros que, para 2025, ya no tendrán.