Maysoun Douas es concejala de Más Madrid en el Ayuntamiento de la capital, pero también es doctora en Física, emprendedora de una start up... y la primera mujer musulmana en las instituciones madrileñas. Por eso, ElPlural.com ha charlado con la representante política de distintos asuntos de actualidad, como las protestas por la muerte de la joven iraní Masha Amini, el feminismo o el papel de la extrema derecha que representa Vox en las agresiones racistas.

Douas ha reflexionado sobre qué podemos hacer para ayudar a las mujeres iranís desde nuestro país, así como qué representa el velo para las musulmanas. Asimismo, ha analizado la situación actual de la capital, en medios de sendas polémicas por la sanidad o la limpieza, y la postura que toma el alcalde José Luis Martínez-Almeida por la inserción de otras religiones y culturas.

"El Ayuntamiento de Madrid no hace todo lo que está en su mano por la inclusión", defiende la concejala, quien asegura que Madrid está experimentando un retroceso y que falta implicación ciudadana. "Hay muchos extranjeros que no saben que pueden participar en política, que no saben que tienen que votar, que pueden participar en las decisiones del día a día", ha afirmado en una conversación con muchas claves políticas.

PREGUNTA (P). Para todos aquellos que no la conozcan. ¿Quién es Maysoun Douas?

RESPUESTA (R). Pues Maysoun Douas es una persona muy polifacética, diría que muy implicada en la mejora de la sociedad y que no pierde oportunidad para escuchar, ayudar y hacer de esta sociedad una construcción mejor.

P. También hay que resaltar que es fundadora de la start up 'Comission'. Doctora en Física, ha sido premiada en 2021 dentro del top 100 mujeres líderes en España y es la primera y única concejala musulmana en el Ayuntamiento de Madrid. Se habla mucho de igualdad y de machismo, pero ¿cómo es ser mujer, con toda esta trayectoria y además musulmana, en esta institución?

R. Es curioso. Normalmente cuando me presento, cuando me preguntan sobre mi trayectoria, la gente suele mirar esos sitios a los que tuve marcadas antes. Y creo que en cada uno de ellos también hay una historia de superación, pero también una historia de aliados, de personas que también creen que la diversidad tiene que formar parte de esta sociedad.

No digo que lo haga más fácil, pero creo que hay una combinación de factores que hacen que esos suelos pegajosos sean menos pegajosos o que por lo menos perfiles como yo demos esa esperanza de que con el esfuerzo, con el trabajo constante y, sobre todo, tener esa, esa voluntad de mejora de la sociedad, acaba dando sus frutos.

P. ¿Ha encontrado alguna dificultad para llegar a la posición en la que está hoy en día?

R. Te diría que fácil no ha sido. Cada una de ellas ha sido una historia de superación. Creo que muchas mujeres encuentran muchísimas trabas cuando tienen que decir, cuando tienen que defender sus proyectos vitales, empezando desde el entorno familiar al de los amigos, al entorno laboral. Y creo que eso es una cosa compartida entre todos. Luego, en mi caso, al ser mujer musulmana visiblemente musulmana, creo que también hay una parte de sensibilización y pedagogía que tengo que ir acompañando en cada uno de mis pasos, explicando quién soy, cuáles son mis valores, qué es lo que aporto en cada uno de los espacios en los que quiero trabajar, quiero estar y creo que afortunadamente la sociedad quiere escuchar. Y creo que soy el ejemplo y reflejo de que las cosas son difíciles, pero no imposibles.

P. En el último pleno del Ayuntamiento, el pasado 25 de octubre, el Grupo Mixto presentó una proposición de declaración para condenar la represión del gobierno y de la policía en Irán y las protestas por Masha Amini, la joven a la que asesinaron por llevar mal colocado el velo. Esto se aprobó por unanimidad, pero es suficiente.

R. Nosotros presentamos una enmienda, una batería de enmiendas que combinaba parte de lo que presentaba el Grupo Mixto y las reclamaciones que nos habían trasladado a las mujeres de Irán. Tras escucharlas, escuchar cuáles eran sus reivindicaciones y qué es lo que necesitamos hacer desde España, desde Madrid, para que esa lucha no acabe en agua de borrajas. Y que, como tantas otras veces que hemos visto a las mujeres salir y acompañarlas, para que el resto de la sociedad no acabara en silencio.

El feminismo no engloba todas las reivindicaciones

Y creo que nos quedamos cortos, pero es importante llegar a la unanimidad. Es importante que todos estemos de acuerdo, que en la condena es importante que todos traigamos la voz de esas mujeres, de esa lucha feminista al Ayuntamiento de Madrid. Y es importante que la que la sociedad madrileña, que los vecinos y las vecinas de Madrid expresen su solidaridad con esa, con esa lucha. Creo que nos dejamos muchas cosas por el camino, pero lo importante era llegar a ese consenso.

P. Hablando de feminismo, en ese mismo pleno, la concejala del Grupo Popular dijo que “hay un feminismo valiente, el de las mujeres iraníes que llevan mucho tiempo arriesgando su propia vida por el reconocimiento de sus derechos, y luego el feminismo cobarde, el suyo, que decía defender los derechos de las mujeres, pero con muchas excepciones”. ¿Por qué se arroja el feminismo incluso en casos como este?

R. Yo creo que dentro del feminismo, de los feminismos, porque cada cual lo vivimos de una forma diferente, hemos visto que no siempre se engloba todas las reivindicaciones de las mujeres. Creo que muchas veces pecamos de etnocentrismo en estas cosas y que nos olvidamos de que muchas mujeres en muchos sitios se expresan de muchas formas diferentes.

Ser inclusivas en ese sentido creo que es fundamental y creo que afortunadamente en los últimos años estamos viendo que el feminismo está entendiendo que la lucha es una, pero desde diferentes ámbitos, desde diferentes prismas, y eso es lo que creo que ha intentado hacer uso de la concejala del Grupo Popular. Se le agradece que intente sumarse al feminismo, pero creo que hacen una torpe labor haciéndolo desde esas reivindicaciones falsas o vacías.

P. En este mismo pleno usted denunció la instrumentalización de un símbolo religioso como es el velo y pudimos escuchar al Grupo Mixto diciendo que trabajarán para “que el hiyab sea una prenda de ropa y para que no sea una cadena ni una condena”. ¿Hablar del velo como una simple prenda de ropa nos genera un conflicto?

R. Ser una minoría dentro de una mayoría, ser una mujer musulmana en una sociedad de tradición cristiana, tiene sus dificultades y muchas veces la gente confunde las terminologías con los motivos y los valores que nos mueven a diferentes grupos, no solo ya a las mujeres musulmanas, sino también a las budistas, también a las judías, las ortodoxas, las evangélicas. Y creo que hay mucho trabajo de pedagogía que se tiene que hacer en ese sentido, y es importante que los representantes públicos tengan la información suficiente para defender a todas las vecinas y todos los vecinos con coherencia, no atendiendo a su singularidad o atendiendo a sus opciones religiosas.

Almeida no está haciendo todo lo que puede por la inclusión

En este caso creo que es banalizar una decisión el hablar de religión como si fuese una simple prenda porque simboliza mucho más y para las personas que los llevamos forma parte de nuestras convicciones morales y éticas. Y eso no es un impedimento para que seamos libres en una sociedad como la española o la iraní. Y es justo el core, el núcleo de todas esas movilizaciones para reivindicar la libertad de expresión, la libertad de vestimenta, la libertad de religión y todas las libertades en conjunto. Y por eso ha tenido ese éxito que no se ha podido reprimir en todas estas semanas y ya vamos cerca de los 50 días.

P. En este caso, toda la violencia racista se produce en un momento en el que la extrema derecha tiene bastante empuje en no solo en nuestro país, también a nivel mundial y europeo. ¿Tiene algo que ver? ¿Cuál es el papel de Vox aquí en Madrid, en todo esto?

R. Se les ha ido complicando el asunto, según iban entrando más en el trabajo institucional, en tener que escuchar a los vecinos, a las vecinas, al trato con el resto de los grupos municipales. Creo que puede que entraran con una vehemencia, y de hecho vemos cuáles son sus declaraciones en temas de género, de violencia, de género, de equidad y su discurso está allí presente. Pero es verdad que no es tan simplista, no es tan fácil para ellos abordar estos temas que tienen cierta complejidad y que aluden, al fin y al cabo, a vecinos y vecinas de Madrid, que igualmente han elegido una opción personal.

P. ¿Qué hace el Ayuntamiento de Madrid por la integración? Está haciendo todo lo que está en su mano.

R. Aquí tenemos un problema por varios frentes. No creo que el Ayuntamiento de Madrid está haciendo todo lo que está en sus manos por favorecer la inclusión y, de hecho, la última celebración de la fiesta del fin del ayuno tuvo bastante polémica porque se les rechazó a la comunidad bangladesí el poder hacer uso de unas instalaciones deportivas para dos horas de rezo. Creo que falta una figura que intermedia entre las diferentes confesiones a nivel del ayuntamiento de Madrid.

Pero creo que también hay una falta de participación ciudadana, porque no todas están apegadas a la política. Me arriesgaría a decir que el número de personas migrantes con derecho y capacidad de voto en Madrid es muy poco. Hay muchos extranjeros que no saben que pueden participar en política, que no saben que tienen que votar, que no saben que pueden participar en esas decisiones del día a día respecto a su distrito, a su ciudad, a su barrio mismo, a su calle. Y creo que eso es una deficiencia a nivel de participación ciudadana, que el Ayuntamiento tendría que mitigar.

P. ¿Cuál es la propuesta de Más Madrid al respecto?

R. Tenemos que empezar. Nosotros ya estamos hablando con mucha población de migrantes, pero también de las minorías religiosas. Entender cuáles son esas deficiencias que nos están cubriendo a nivel del Ayuntamiento de Madrid, pero también llamándoles a la participación ciudadana. Al final, cuando todos participamos en la mejora de un parque, de una biblioteca, de una oferta cultural, lo hacemos con la pluralidad de opiniones y nosotros intentamos tenerlas en cuenta a la hora de hacer nuestras propuestas en cualquiera de los ámbitos, porque nuestras vivencias en la ciudad son diferentes, nuestra visión es diferente y todos enriquecemos cuando participamos en estas decisiones.

P. Cambiando un poco de tema, Madrid está en el centro de todas las críticas por sanidad, por la limpieza de las calles. ¿Cómo está Madrid?

R. A Madrid se le ha empobrecido en todos los sentidos en los últimos años. Vivimos aquí, nos enorgullece vivir, ser parte de esta ciudad, de esta comunidad autónoma, y nos da muchísima pena el deterioro que estamos viendo en todos los servicios públicos. No poder pasear de forma tranquila por las calles, por los alcorques vacíos, por el amontonamiento de terrazas que impide también el disfrutar de las calles…

La apuesta del Ayuntamiento de Madrid es muy pobre

También a nivel cultural estamos viendo cómo falta mucha oferta, pero sobre todo que sea variada y que sea integradora, inclusiva. Hay muchísimas cosas que están faltando en temas de innovación. Por ejemplo, hemos quedado semifinalistas, pero no finalistas en los premios de la Comisión Europea y Capital, y eso tiene que ver con que nos estamos quedando atrás respecto a otras capitales europeas y otras ciudades españolas.

P. ¿Y nos estamos quedando atrás por culpa de quién?

R. La apuesta que se está haciendo es muy pobre, hay mucho margen de mejora dentro de la propia ciudad. Y esto de intentar tomar las decisiones sin ser inclusivos, sin escuchar a las personas competentes o a las personas que están inmersas en esos procesos, está empobreciendo todas las decisiones.

Venía justo de hablar con servicios Sociales del distrito de Ciudad Lineal y ellos me decían "es que con falta de personal es imposible que podamos dar solución a todas las peticiones que nos están llevando. Darle el tiempo suficiente a cada uno de los expedientes para entenderlo, para ayudarles bien". Y creo que no es solo en servicios sociales, es algo que se extiende al resto de los servicios municipales que hoy por hoy tienen que satisfacer las necesidades de los vecinos y de las vecinas. No están siendo escuchados y eso significa que al final no están siendo atendidos.

P. Esta situación podría cambiar en las próximas elecciones porque según las últimas encuestas Almeida está un escaño de poder perder el Ayuntamiento. ¿Cómo valora los datos?

R. Los madrileños y las madrileñas han entendido que no es suficiente con el esfuerzo que está haciendo o que nos está vendiendo el Gobierno, que hay muchísimo margen de mejora. Ellos lo ven y lo viven todos los días y creo que entienden que hay una alternativa. Nosotros como fuerza política hemos estado dando muchísimas propuestas, hemos estado incidiendo en muchísimas decisiones que creíamos que eran equivocadas y que finalmente se nos ha escuchado en ellas. Y creo que esa complicidad con los vecinos y con las vecinas va a dar su resultado el año que viene.