Hace tiempo que Madrid ha dejado de ser una comunidad en la que vivir por los disparatados precios de la vivienda mientras el gobierno de Isabel Díaz Ayuso sigue dando rienda suelta a la especulación.
Para combatirla desde las instituciones, Más Madrid ha presentado una batería de enmiendas parciales a los Presupuestos de 2026 cuyo objetivo es la creación de un Fondo Público Antiespeculación destinado a proteger el derecho a la vivienda, frenar la escalada de precios y ampliar de manera estructural el parque de vivienda protegida en la región, según detalla el comunicado al que ha tenido acceso ElPlural.com.
La portavoz del partido, Manuela Bergerot, califica la propuesta como un “cortafuegos para frenar la subida de los alquileres y blindar la vivienda como lo que es: un derecho”. “Gracias a este fondo podemos impedir que las viviendas tensionadas acaben en manos de fondos como Blackstone (…) La Comunidad podría tener el derecho a comprarlas antes y destinarlas a alquiler asequible, creando vivienda protegida”, concreta.
En declaraciones remitidas a este periódico, la portavoz del partido progresista deja claro que lo van a repetir “las veces que haga falta”, porque “esto no va de parches ni de ocurrencias”, sino de un modelo a cambiar: “Hay que dejar de perdonar impuestos a los ricos y de asfixiar a quien no llegue a fin de mes”.
“La vivienda no puede seguir siendo un casino financiero donde la banda siempre gana. Hay que proteger a los ciudadanos”, proyecta, apuntando que “este es un valiente paso en esa dirección”.
Precios disparados
En la práctica, la propuesta surge ante la crisis de la vivienda y contra las políticas neoliberales del PP. Con los datos encima de la mesa, Más Madrid afea que los alquileres han subido un 14% en el último año y que el precio medio de una casa se sitúa en 1.520 euros en la capital, mientras que en otros municipios la situación no es mucho más halagüeño, de manera que en espacios como Getafe, Móstoles o Leganés el montante roza los 1.200 euros mensuales.
A juicio del partido que trae a colación las enmiendas, el fondo permitirá a la Comunidad de Madrid ejercer un derecho de adquisición preferente sobre inmuebles ubicados en zonas tensionadas o con incremento de precio significativos sin que tenga que declararse previamente.
El fin último, explican las sigas verdes, es el de retirar dichos ladrillos del mercados especulativo e incluirlas en un parque público de protección permanente, con destino a alquiler social, asequible o venta protegida, pero que en ningún caso sean nuevamente puestas en el mercado para especular.
Para financiarse, el fondo podrá disponer de dotaciones presupuestarias y la ampliación de la capacidad fiscal de Patrimonio y Sucesiones. Más Madrid sitúa el volumen inicial en 786 millones de euros, que equivalen a lo que la región en la que el PP dispone de mayoría absoluta deja de recaudar por el Impuesto sobre el Patrimonio para grandes fortunas.
A ellos hay que sumar 73 millones de euros que se quedan por el camino con las nuevas deducciones en Sucesiones y Donaciones. “Con esta cantidad sería posible adquirir unas 2.050 viviendas al año, lo que en un ciclo presupuestario de cuatro años supondría la creación de un parque adicional de 8.200 viviendas públicas en protección permanente”.
La vivienda en Madrid
La vivienda agoniza en Madrid. Los datos son lapidarios y quien intenta acceder a una casa se da constantemente de bruces contra ellos. Algunos de ellos deslizan que hacen falta 15 años de renta para adquirir una vivienda o que el 15% de los encuestados tuvo retrasos en el pago de gastos relacionados con la vivienda principal, independientemente de que se trate de hipoteca, alquiler, gas comunidad o similares.
Tampoco escapa a la realidad la ratio de accesibilidad respecto a la tendencia a largo plazo en las comunidades autónomas. Algunas fuentes de datos sitúan a Madrid como el segundo puesto en el indicador solo por detrás de Baleares, con una subida de cerca al 1%.
En otro orden de cosas, pero que desliza la misma situación, el hogar típico destinó en Madrid 15,7 años de renta para adquirir una vivienda en Madrid en junio de 2025, lo que duplica la media española (7,2 años).
En lo que se refiere a vivienda pública, el escenario es igualmente preocupante. Entre 2019 y 2024. La oferta de este tipo de hogares solo aumentó en 321: 63 en 2019, 0 en 2020, 137 en 2021, 4 en 2022, 117 en 2023 y ninguna en 2024, a pesar de que residen en la región 475.149 personas más que en 2019.
