El vicepresidente y portavoz de la Junta de Castilla y León, Francisco Igea, ha expresado que mantiene su confianza en la palabra del presidente de la Junta, Alfonso Fernández Mañueco, de que no habrá adelanto electoral. El conflicto en el seno del Gobierno regional se ha acentuado y hecho evidente con la polémica que rodea a la consejera de Sanidad, la naranja Verónica Casado.
Esto lo ha expresado en un desayuno informativo de Nueva Economía Forum celebrado en Madrid, donde ha acompañado y presentado a la consejera, cuyo plan de reestructuración del sistema sanitario autonómico la ha llevado al centro de la polémica, no solo de la oposición, sino también de sus socios de Gobierno, el PP. Entre las críticas más sonadas resaltan las de Javier Maroto o los populares de Ávila y Burgos.
“Sé que no lo va a hacer porque me ha dado su palabra y yo confío en la palabra del presidente, nunca me ha engañado”, ha dicho Igea al ser preguntado por un posible adelanto electoral en Castilla y León. Además, ha señalado que “nadie lo entendería” y que “hay que dar un mensaje de tranquilidad y de estabilidad porque la gente está contenta y así lo dicen las encuestas”.
En el mismo sentido, ha defendido que “los gobiernos de coalición tienen que ser leales porque si hay algo que se valora en nuestro país es la lealtad”. No obstante, ha advertido que “la lealtad no es sumisión”.
Por su parte, Verónica Casado ha asegurado encontrarse “muy bien”, aunque sorprendida por las críticas a su reforma sobre el sistema sanitario de la comunidad. Así, ha asegurado que la reorganización permitirá no dejar fuera a ninguno de los profesionales que fueron contratados durante la pandemia. “Gracias a la reordenación, que no es recorte, es refuerzo, van a quedarse en el sistema”, ha dicho.
