La vida del tuit del presidente de Castilla y León, Alfonso Fernández Mañueco, felicitando a la recién elegida presidenta del Congreso de los Diputados, Francina Armengol, por mayoría absoluta, fue tan fugaz que a la mayoría de los usuarios de la red social no les dio tiempo a verlo, aunque, entre sus casi 26.000 seguidores, siempre hay quien lo inmortaliza y lo comparte antes de que, discretamente, se borre.

La cuenta de Mañueco tuiteaba, según esa imagen compartida, a las 13:25 horas de ayer, día en que se celebraba la constitución del Congreso, un mensaje en el que se escribía “Una mayoría de diputados han dado su confianza @F_Armengol para presidir el @Congreso_Es en la XV Legislatura. Le deseo lo mejor para afrontar la responsabilidad de dirigir y asegurar el correcto funcionamiento de la Cámara Baja”, citando a la propia presidenta.

Sin embargo, al pie del post puede leerse “This post has been deleted”, es decir, “Este post ha sido borrado”.

¿Llamada de Génova?

Uno de los usuarios que compartió la imagen sugería que el presidente de la Junta de Castilla y León se había visto obligado a retirar el tuit a consecuencia de una llamada realizada desde Génova, sede del Partido Popular en Madrid, algo que desmiente tajantemente el equipo del propio Mañueco: “Es completamente falso”, afirman.

Parece, por tanto, según el desmentido del equipo del presidente castellano y leonés, que estos son los riesgos de dejar la gestión de redes sociales personales en manos de terceros, que en ocasiones lanzan mensajes políticamente correctos que, posteriormente, exigen eliminar los titulares de la cuenta con su nombre y apellido.

Este medio ha intentado, infructuosamente, ponerse en contacto telefónicamente con los más cercanos al presidente solicitando la versión oficial de esa felicitación (pero no) y de su retirada.

Felicitaciones a los suyos

Los tuits que sí permanecen en la cuenta del presidente Mañueco son los dedicados, también durante la mañana de ayer, a sus compañeros de partido que accedieron a puestos de relevancia en las cámaras parlamentarias.

“#CastillayLeón tendrá voz en los máximos órganos del Congreso y el Senado. Enhorabuena a José Antonio Bermúdez de Castro y @JavierMaroto. Estoy muy orgulloso de vosotros, al igual que todos los miembros del @PPopularCyL. Seguimos trabajando por #CYL y España”, escribe la cuenta de Mañueco sobre el leonés Bermúdez de Castro, diputado por Salamanca y vicepresidente segundo del Congreso, y el más que controvertido Maroto, más vasco y menos castellano y leonés, que fue nombrado ayer vicepresidente primero del Senado.

Cabe recordar que Javier Maroto nació en Vitoria, ciudad de la que fue alcalde, y también diputado por Álava, puesto que no pudo revalidar en 2019, a pesar de encabezar la lista del PP por esa provincia.

El Partido Popular no tuvo empacho en refrendar su empadronamiento en Sotosalbos, provincia de Segovia, para que la Junta de Castilla y León saliera en su auxilio en el objetivo de garantizar que conservara un puesto en las Cortes Generales, nombrándole senador por las Cortes de la Comunidad, que el PP controlaba, apoyado por su entonces socio de gobierno, Ciudadanos.

Maroto nunca ha destacado especialmente en su representación y defensa de Castilla y León en el Senado de España, tierra en la que sólo aterrizó en paracaídas para asegurarse un lugar en la Cámara Alta, y, en cambio, protagonizó una sonada polémica cuando afirmó que Castilla y León tenía ocho provincias, en lugar de las nueve que realmente tiene.