Este miércoles se ha celebrado la Comisión de Desarrollo Urbano y de Obras y Equipamientos del Ayuntamiento de Madrid, en la que el Gobierno de José Luis Martínez-Almeida ha respondido a las denuncias de Más Madrid alertando de un pelotazo urbanístico en el distrito madrileño de San Blas-Canillejas, concretamente en suelo municipal del polígono industrial Iveco-Pegaso en el que se pueden desarrollar usos terciarios o industriales. Se han defendido de las acusaciones, pero, mientras lo han hecho, han realizado una afirmación que confirma que lo que hicieron es ilegal.

Mariano Fuentes, concejal del Grupo Municipal de Ciudadanos y delegado del Área de Gobierno de Desarrollo Urbano, ha sido el que ha defendido que el estudio de detalle se realizó sobre las parcelas de Goodman y no sobre las municipales, ya que de lo contrario "sería ilegal". No obstante, lo ha hecho omitiendo que, ciertamente, el estudio de detalle se realizó en ambos suelos, en las de Goodman y en las municipales.

"Es una buena noticia para el Ayuntamiento y para todos los madrileños esta venta (…) El estudio de detalle de Goodman se realiza sobre la parcela de Goodman, evidentemente. Sería ilegal y el Ayuntamiento no lo hubiera podido aprobar en ningún caso si hubiera tenido afección a estas parcelas municipales, por tanto, creo que en esa parte está indicada", ha expresado Fuentes.

Fuentes del Ayuntamiento explican a ElPlural.com que el delegado se ha confundido y defienden que "la Ley de Suelo obliga a hacer estudios de detalle por manzana o por unidades de ejecución equivalentes". Así, señalan que en este caso se hace sobre una manzana que, al ser de distinto propietario, el Ayuntamiento debía aceptarlo si le interesaba o no. Lo terminó aceptando porque mejoraba las condiciones, pero "si se hubiera hecho alguna alegación no se hubiera seguido".

Ante este argumentario, fuentes de Más Madrid indican a este medio que no tiene nada que ver la manzana o unidad de ejecución equivalente de la ley y que en el estudio detalle de Iveco-Pegaso hubiera bastado con sacar toda la manzana que ahora venden, sin incluir las dos de Goodman. Además, muestran su sorpresa al ver la tesitura de que se está acusando al Gobierno de Almeida de manipular la venta de un suelo público donde el único licitador es el redactor del estudio de detalle sobre suelos que no son suyos, cosa que el delegado dijo que era ilegal y luego reculan asegurando que no tiene nada que ver. Finalmente, se preguntan quiénes deberían haber puesto alguna alegación, si Más Madrid o el propio Ayuntamiento a sí mismo.

Más Madrid denuncia el pelotazo urbanístico

Paco Pérez, concejal de Urbanismo de Más Madrid, aclaró en declaraciones a ElPlural.com que desde la formación habían presentado un recurso de reposición contra la licitación de seis parcelas situadas en el polígono industrial Iveco-Pegaso, en el barrio de Las Rejas, ya que consideran que los pliegos no se ajustan a derecho y que la licitación es lesiva para los intereses generales.

Uno de los aspectos que les llamó la atención fue que se había presentado un único licitador al concurso: Goodman Guadarrama Logistics (Spain) S.L., empresa que forma parte del grupo Goodman, al igual que la empresa propietaria de los suelos colindantes, Goodman Industrial Spain S.L.U.

Además, desde Más Madrid consideran que el valor de repercusión establecido para la venta de las parcelas, 221 euros/m2, es muy bajo respecto a otras valoraciones recientes de suelo de uso para actividades económicas. También señalan que en el caso de la licitación, el informe de valoraciones no está publicado, por lo que es imposible comprobar cómo se ha establecido dicho precio, así como se desconoce el proyecto arquitectónico a desarrollar en dichos suelos.

La velocidad con la que se ha tramitado tanto el documento de planeamiento que permitiría el desarrollo de la plataforma logística (apenas dos meses entre la finalización del periodo de información pública y el de aprobación) como la licitación para la enajenación de suelo (un mes para que los licitadores presentaran su plan, la mitad del plazo habitual) es otro motivo que ha hecho sospechar a Más Madrid.