A las 17:15 del 29 de octubre de 2024, en Valencia, al ex president de la Generalitat Valencia y actual diputado premium de Les Corts, Carlos Mazón, y a la periodista olvidadiza Maribel Vilaplana todavía les quedaban una hora larga de sobremesa en El Ventorro. Utiel se desbordaba y vecinos sucumbían. Ahogados. La presa de Forata amenazaba con no resistir, los vídeos corrían por los grupos de WhatsApp y los medios se hacían eco de la situación dramática. El Cecopi ya estaba reunido y, tras 400 días, se va esclareciendo qué pasó desde ese momento hasta tres horas después, cuando se envió el Es-Alert.

Los vídeos ya habían revelado que la posibilidad del envío masivo de un mensaje a los móviles de la población se había puesto encima de la mesa del Centro de Coordinación Operativa Integrado, encargado de gestionar la DANA, a primera hora de la tarde, aunque no llegó a los terminales hasta las 20:11 horas. El subdirector general de Emergencias y presente en aquel órgano, Jorge Suárez, ha terminado de confirmarlo esta semana, fijando las 17:15 como hora clave y ofreciendo nuevos detalles.

La Conferencia Hidrográfica del Júcar (CHJ), tal y como ha declarado el testigo de la causa abierta en el Juzgado de Catarroja, ya había avisado del riesgo de la presa de Forata, dando incluso un margen temporal de posible rotura y el nivel de subida del agua que ello podría suponer en los municipios aledaños. Los presentes, igual que Mazón declaró, conocían que Utiel estaba una situación extrema, pero tan solo Suárez sugirió por primera vez la posibilidad de enviar un mensaje masivo al que no denominó Es-Alert.

Después de esta primera sugerencia, la Unidad Militar de Emergencia (UME) trasladó las dificultades para acceder a la comarca Utiel Requena y el jefe de Bomberos del Consorcio Provincial, José Miguel Basset, expuso que, con la caída de la noche, sería más complicado el apoyo de los medios aéreos. “Ahí se plantea, y creo que lo dice Miguel Polo (presidente de la CHJ) o alguien de la CHJ, que teníamos que avisar a la población, eso no sería más allá de las 17:45”, ha relatado el subdirector general de emergencias.

“En ese momento lo vuelvo a poner encima de la mesa”, ha relatado Suárez, “dije ‘podemos utilizar ES ALERT o alertas a los móviles’, sobre las 17:45 – 18:00 horas”. Mazón aún no había pagado la cuenta del restaurante. Su propuesta, además, venía acompañada de un posible texto: “Ante la evolución situación se recomienda que accedan a zonas altas y permanezcan atentos”. Es en este momento que, la ex consellera de Justicia e Interior y principal investigada de la causa, Salomé Pradas, realizó su primera intervención de relevancia.

 “No apoyó el primer Es-Alert, no veía bien mandarlo sin que lo supieran los alcaldes y ordenó cambios en los SMS”, ha desgranado Suárez, añadiendo que esto provocó “una situación tensa en el Cecopi”. “El colapso es algo muy importante, en ese momento tengo dos referencias, un compañero que no estaba en el Cecopi, Rafael Navarro que le pido nos asista a y puso a las 18.01 'van a mandar el Es-Alert”, ha explicado a la jueza. Esto generó “debate y tensión” y el jefe de bomberos habla de “no generar alarmismo”.

Muchas personas habían muerto ya en ese momento. A las 18:05 horas, Pradas suspendió el Cecopi para dar un espacio a la reflexión. Mazón no le respondía al WhatsApp, según las pruebas aportadas a la jueza por la propia exconsellera, desde las 14:11 horas. Pasa el tiempo, con Mazón entre El Ventorro, el parking y el Palau, atendiendo a su encuarentenada versión, y no es hasta las 19:30 horas que se decide que ha de enviarse un mensaje masivo. Sin embargo, ni por esas se actúa, dado que aparecen dudas sobre la redacción.

El jefe de Gabinete, José Manuel Cuenca, también ignoró las actualizaciones y llamadas de Pradas por esta red hasta las 19:54. “Salo, de confinar nada, por favor. Calma”, le escribió a esa hora. “Está la cosa muy muy mal”, replicó Pradas. “Ya mujer”, espetó Cuenca. “Debo por toda la provincia”, insistió la exconsellera. “Pero confinar una provincia es una barbaridad. Una cosa es zonificar comarcas”, certificó Cuenca. “Vamos a enviar mensaje de precaución”, trasladó Pradas a las 19:55. En ese momento, dio comienzo una discusión por a qué zonas confinar.

A la par, en el Cecopi, Pradas pedía cambios en el texto que demoraron aún más el Es-Alert. Entre las vitales peticiones, la exconsellera solicitó que se quitara el acento de la palabra ‘València’ porque no estaba dirigido solo a la capital, proponiendo que se pusiera Valencia. También exigió cambiar la palabra ‘aquest’ por ‘este’ y ‘tipus’ por ‘tipo’. A las 20:08 horas, Cuenca le solicitó “calma”. A las 20:11 horas, cuando una amplia mayoría de las 230 víctimas mortales ya se habían producido y la gente auxiliaba desde sus balcones a vecinos, llegó el mensaje.

A las 20:15 horas, Cuenca trasladó a Pradas que Mazón “ya llega”, aunque aún tardaría 15 minutos más en entrar por la puerta saludando, ataviado con su jersey amarillo. “Quítate de la cabeza (decretar la ley de Emergencias para confinar)”, siguió escribiendo Cuenca a Pradas. “Tranquila Che”, dejó plasmado como último mensaje. Pradas continuó dándole más información hasta las 20:22, hora a la que el expresident todavía no había llegado al Cecopi.

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