El pasado miércoles Albert Rivera e Inés Arrimadas, en la víspera de una concentración convocada por Ciudadanos en apoyo a la mujer que sufrió una agresión, convocaron a los medios de comunicación y, frente a ellos, se dispusieron a retirar lazos amarillos. El propio líder naranja explicó que se trataba de un gesto “simbólico”, pero pronto fue troleado en redes sociales con el hashtag #RiveraQuitameEste. Pero no todos han criticado o se han reído de la acción de Rivera. El líder de Vox, Santiago Abascal, ha mostrado su apoyo férreo y sin fisuras.
En una tertulia en Esradio, Abascal ha afirmado que “la mejor defensa es un buen ataque” y que fue “un gesto importantísimo para apoyar a la gente que se la está jugando allí”. También ha asegurado que ya pasó en el País Vasco y que “la crispación era necesaria y había que defenderse”. Y es que, el líder del partido ultraderechista considera que “la mejor defensa es un buen ataque”.
Ha confirmado también que Vox irá a la manifestación convocada para el próximo día 9 de septiembre por el empresario José Manuel Opazo. A su juicio, es muy “importante” porque los partidos independentistas intentarán “la reedición del desafío y del golpe”.
