La batalla política en torno al agua en Castilla-La Mancha ha sumado un nuevo capítulo tras la firma de la Declaración de la Región de Murcia por parte de Alberto Núñez Feijóo y todos los dirigentes autonómicos del Partido Popular, incluido el presidente del PP en Castilla-La Mancha, Paco Núñez. Un movimiento que ha sido aplaudido en Murcia y en el Levante, pero que ha servido también para que Vox se presente como el verdadero autor intelectual de ese discurso trasvasista.

El portavoz del Grupo Parlamentario Vox en las Cortes de Castilla-La Mancha, Iván Sánchez, ha cargado contra el PP asegurando que el documento rubricado este domingo en Murcia no es más que una “copia” de lo que Vox lleva años defendiendo.

“Parece que al Partido Popular cada día le gustan más las propuestas de Vox y cada día nos copia. Lo que pasa es que no es lo mismo un billete de 500 que una fotocopia muy bien hecha. Por mucho que intenten copiarnos, no van a dejar de ser una copia”, ha sentenciado, en un tono que buscaba marcar distancia con el partido de Feijóo.

La llamada ‘Declaración de Murcia’ sitúa el trasvase Tajo-Segura en el centro del debate. El PP quiso escenificar unidad en torno a un modelo que proclama su negativa al cierre de este trasvase, esencial para alimentar al Levante. De este modo, Feijóo se alineó con la presión murciana y valenciana para reivindicar un plan nacional del agua, que permita garantizar la llegada de recursos hídricos a las zonas deficitarias.

El PP "blanquea" lo que Vox lleva en su programa

Para Vox, sin embargo, esa reclamación no es nueva ni propia del PP. Sánchez ha recordado que su formación fue la primera en plantear un modelo de interconexión de todas las cuencas hidrográficas, una suerte de trasvase generalizado que, a su juicio, evitaría lo que califican como “guerras absurdas” entre territorios. En este sentido, el parlamentario ha considerado que, aunque el PP trate ahora de apropiarse de esas ideas, en realidad solo está “blanqueando” lo que Vox lleva en su programa desde su entrada en las instituciones.

El discurso de Vox busca así reforzar la idea de que son ellos quienes marcan la agenda política en materia de agua. Sánchez incluso ha llegado a valorar positivamente que los populares “entren en la senda del sentido común”, aunque subrayando que el electorado debe saber distinguir entre “el original y la copia”.

El resultado de esta pugna entre las derechas es un debate en el que Castilla-La Mancha vuelve a ser la gran olvidada. Mientras el PP firma declaraciones en Murcia y Vox se vanagloria de que esas firmas son solo copias de su ideario, los ríos de la región siguen condenados a ceder agua sin que nadie en la derecha levante la voz para defenderlos.

Con estas acusaciones, Vox no solo golpea al PP en el terreno del discurso, sino que exhibe su convicción de haber colonizado ya el espacio ideológico de la derecha en España. 

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