Vox ganará hoy un importante batalla en su guerra sin cuartel contra la violencia de género, que los dirigentes ultras consideran que no existe, sino que se trata, en palabras de su dirigente nacional Javier Ortega Smith, de “una gran mentira” cuya negación es “como negar el día o la noche”.

Para demostrar la extravagante tesis de los ultras españoles, el Gobierno andaluz aprueba hoy la creación de un teléfono de auxilio para las víctimas de 'la violencia intrafamiliar', en cumplimiento de la exigencia planteada en junio por sus socios parlamentarios como condición para retirar su enmienda a la totalidad de los Presupuestos de 2019 y dar su luz verde a los de 2020.

Gratuito y permanente

El Ejecutivo de PP y Ciudadanos aprobará también "los protocolos de derivación a los servicios públicos para su seguimiento". 

En principio, el nuevo teléfono será un servicio gratuito y permanente, disponible las 24 horas los 365 días del año, operativo en toda la comunidad, anónimo y confidencial, que será atendido por personal especializado. Al igual que el resto de teléfonos de estas características, derivará, en su caso, a las Fuerzas de Seguridad del Estado o al organismo que se determine.

El nuevo teléfono se solapa con otros números de auxilio ya existentes en la Administración autonómica, como el de atentación a las víctimas de malos tratos por violencia de género –90020099, que se suma al 016 nacional– o el teléfono de asistencia a menores maltratados o víctimas de abandono o desatención –900851818–.

Un cierto lío

Cuando en junio pasado se le preguntó si el futuro teléfono atendería a mujeres maltratadas, el propio portavoz de Vox, Alejandro Hernández, respondía sin dudarlo que "por supuesto que sí".

No fue eso, sin embargo, lo que dos semanas después decía la consejera de Igualdad, Rocío Ruiz, en el Pleno del Parlamento del pasado 27 de junio: "Ni conceptual, ni jurídicamente, la violencia de género y la violencia doméstica no son lo mismo", por lo que el nuevo teléfono de atención a la ciudadanía atenderá cualquier violencia intrafamiliar que no tenga relación alguna con violencia machista porque, "según recogen los artículos 173 y 153 del Código Penal, son dos tipos de violencia diferentes".

Violencias distintas

Bestia negra de la extrema derecha, la Ley de Violencia de Género aprobada en 2004 con el Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero especifica en un artículo primero que su objeto es “actuar contra la violencia que, como manifestación de la discriminación, la situación de desigualdad y las relaciones de poder de los hombres sobre las mujeres, se ejerce sobre éstas por parte de quienes sean o hayan sido sus cónyuges o de quienes estén o hayan estado ligados a ellas por relaciones similares de afectividad, aun sin convivencia”.

Naciones Unidas define como violencia contra la mujer "todo acto de violencia basado en la pertenencia al sexo femenino que tenga o pueda tener como resultado un daño o sufrimiento físico, sexual o psicológico para la mujer, así como las amenazas de tales actos, la coacción o la privación arbitraria de la libertad, tanto si se producen en la vida pública como en la vida privada". 

Hasta la aprobación de la ley de 2004, las agresiones a mujeres se contemplaban como agresiones en el ámbito doméstico o ontrafamiliar y su regulación está recogida en el artículo 173.2 del Código Penal, que se aplica a quien "habitualmente ejerza violencia física o psíquica sobre quien sea o haya sido su cónyuge o sobre persona que esté o haya estado ligada a él por una análoga relación de afectividad aun sin convivencia, o sobre los descendientes, ascendientes o hermanos por naturaleza, adopción o afinidad, propios o del cónyuge o conviviente (...) o sobre persona amparada en cualquier otra relación por la que se encuentre integrada en el núcleo de su convivencia familiar", con atención especial en personas vulnerables por ser dependientes.