Con motivo de la celebración del mes del orgullo LGTBI, donde se reivindica todavía con más fuerza los derechos del colectivo, desde la oposición en la Junta de Andalucía han acusado al presidente autonómico, Juan Manuel Moreno Bonilla, de actuar como cómplice en los retrocesos que se están dando en esta materia, al acercar filas con la extrema derecha e implementar medidas que impiden la consolidación de una sociedad justa, libre e igualitaria.
La vicesecretaria general del PSOE en el parlamento andaluz, María Márquez, ha cargado contra el Ejecutivo del PP de Moreno Bonilla por ser parte implicada en el retroceso de los derechos del colectivo LGTBI, refiriéndose al presidente autonómico como “el responsable directo de un documento que blanquea pactos que vulneran derechos fundamentales”. En su crítica y denuncia ha puesto el foco en los acuerdos que el PP andaluz ha firmado con Vox en detrimento de este colectivo. Así, según ha expuesto este sábado Márquez, el PP de Moreno Bonilla, "presume en su ponencia de los pactos con la extrema derecha, acuerdos que han derivado en la retirada de banderas LGTBI, bancos arcoíris y otros símbolos en numerosos municipios".
Asimismo, en el mismo orden de cosas, la portavoz socialista ha advertido del retroceso general que se está produciendo en esta materia en este tiempo, insistiendo en el auge de corrientes extremistas y mensajes de odio. "Estamos en un momento decisivo para el curso de la historia, con más radicales que nunca, con más gente metiendo palo en la candela del odio", ha señalado. Por ello, Márquez ha llamado a "reivindicar todo el trabajo logrado y dejar claro que el compromiso del socialismo y del progresismo con los derechos LGTBI es absoluto e irrenunciable".
Rechazo del PP a la bandera LGTBI
En su intervención, la socialista en la cámara autonómica ha querido poner de manifiesto el rechazo que se está dando últimamente por parte del PP a lucir la bandera LGTBI en los balcones de los ayuntamientos con motivo del mes del orgullo y, concretamente, cuando se cumplen 20 años del matrimonio igualitario. “Muchas instituciones gobernadas por el PP no han desplegado la bandera arcoíris en un año especialmente simbólico, en el que se conmemoran 20 años de la aprobación del matrimonio igualitario”, ha sostenido.
En la misma línea, Márquez ha lamentado que los discursos de odio sigan su camino y ha llamado a responder contundentes contra ellos. "No estamos en un momento cualquiera: la caverna ideológica sigue viva, con discursos que niegan el derecho a amar y vivir libremente", ha señalado.
Precisamente sobre esto último también se ha pronunciado Pablo Orellana, secretario de Políticas LGTBI del PSOE en Andalucía. Así, ha puesto de relieve este aniversario tildándolo como “un hito histórico conseguido gracias al compromiso del Partido Socialista y de voces como la de Pedro Zerolo, que nos enseñó que amar no era un privilegio, sino un derecho”. De la misma forma, el secretario en el ramo ha puesto en valor los avances que se han desprendido de esta ley, señalando que unos 80.000 matrimonios han sido registrados, lo que ha permitido a miles de personas “formar familias de pleno derecho, con capacidad para adoptar, heredar y vivir con igualdad jurídica”.
Por su parte, ha querido mencionar también a asociaciones que se encargan de perpetrar estos avances y de fomentar una sociedad libre. Así, ha mencionado a la asociación Crezco, nacida precisamente tras este cambio legislativo, y que "acompaña a niños y niñas de familias LGTBI para que tengan referentes y no se sientan excluidos". "Cada vez que un gobierno socialista lidera, lo hace para avanzar en derechos y mejorar la vida de la gente”, ha defendido.
El veto de Vox: latente en más autonomías
Las declaraciones que ha hecho este sábado María Márquez se producen después de que esta semana se haya conocido que los ayuntamientos de Guadalajara, Talavera de la Reina y Toledo no exhibirán la bandera como consecuencia del veto impuesto por la extrema derecha.
Se da la circunstancia de que las tres ciudades castellanomanchegas están gobernadas por el PP gracias a acuerdos alcanzados con Vox tras las elecciones municipales de 2023. En virtud de esos pactos, los populares han asumido una estrategia de perfil bajo o directamente alineada con las posiciones de Vox en materia de derechos civiles, especialmente en lo relativo a la visibilidad del colectivo LGTBI. La consecuencia directa de esa subordinación es la exclusión sistemática de la bandera arcoíris de los edificios públicos, incluso en fechas como el Día del Orgullo.
Los argumentos utilizados por ambos partidos para justificar esta decisión varían entre la “neutralidad institucional” o el cumplimiento estricto de la doctrina del Tribunal Supremo sobre el uso de banderas no oficiales en fachadas públicas. Sin embargo, esta doctrina fue matizada a finales de 2024 por el propio Supremo, que avaló expresamente la posibilidad de exhibir la bandera LGTBI por no considerarla un símbolo partidista. A pesar de ello, los gobiernos locales de Toledo, Talavera y Guadalajara han decidido no sumarse a esa interpretación y mantener su negativa.