El exdirector económico-administrativo de la sociedad municipal Promálaga, Francisco Muñoz, fue destituido por el Ayuntamiento de Málaga el pasado día 26 pero su despido no había trascendido hasta que la Cadena SER desveló ayer que estaba siendo investigado por la justicia por recibir presuntamente mordidas de empresas proveedoras de la citada empresa, cuyo capital es cien por cien municipal.

Los investigadores de la Agencia Tributaria calculan que entre 2015 y 2016, Promálaga habría pagado a sus empresas proveedoras 342.000 euros, de los que casi 33.400 fueron a parar a la pareja del directivo de la sociedad pública. El caso fue denunciado ante la policía precisamente por un empresario, según el cual al negarse a pagar la mordida exigida por Muñoz había dejado de licitar con esta empresa municipal.

El ex alto cargo cobraba a través de su pareja, procuradora de profesión que supuestamente era contratada por los proveedores de Promálaga para prestarles servicios que en realidad habrían sido una tapadera para cobrar las mordidas del 10 por ciento que les exigía Muñoz. El ya exdirector y su pareja están acusados de cohecho y blanqueo de capitales.