El escándalo de los cribados del cáncer de mama que se está viviendo en Andalucía encuentra un nuevo episodio dentro del drama. En esta ocasión, por la desaparición de historiales médicos de pacientes que se encontraban en los portales virtuales con los que el Servicio Andaluz de Salud (SAS) trabaja. Oficialmente, la Junta de Andalucía reconocía en las últimas horas que por un "importante incremento" de accesos por parte de los usuarios a la aplicación ClicSalud+, los cuales expone se han dado en "momentos puntuales", se ha producido una "incidencia técnica" por la cual no ha sido posible acceder a la plataforma de manera "temporal" para consultar imágenes e informes médicos, si bien aseguran que la incidencia ha sido solventada. 

Fallos técnicos en momentos puntuales los que, según el Ejecutivo andaluz, se han dado pero que, tal y como exponían varias mujeres que han denunciado la situación, esta imposibilidad de acceder a sus historiales se viene dando durante días y siguen, ahora, sin hallar sus informes médicos en los portales virtuales. Esto ha llevado a la Asociación de Mujeres con Cáncer de Mama, AMAMA, a solicitar por escrito a la Fiscalía que proceda a investigar lo sucedido y qué ha ocurrido con estos historiales, pues podría haberse dado destrucción o modificación de las mamografías, así como de los informes, al no encontrarse disponibles para la consulta en las plataformas de la Junta ClicSalud+ y también en el programa informático Iraya con el que trabaja el SAS. Lo hacían, ya que, tal y como trasladaban, eran diferentes las pacientes que han relatado este hecho en las últimas semanas. No solo eso, sino que también reclaman que un profesional sanitario del Hospital Virgen del Rocío pueda convertirse en testigo protegido para que preste declaración sobre este asunto, al igual que solicitan se lleve el volcado de todos los servidores informáticos del servicio sanitario público andaluz donde aparezcan los registros del programa del cribado del cáncer de mama.

 Así, la presienta de la Asociación, Ángela Claverol, ha expresado que han sido "muchas mujeres" las que se han quedado "sin protección" al no poder descargar sus mamografías y sus pruebas de las aplicaciones señaladas. Si el relato de estas mujeres es cierto, el Servicio Andaluz de Salud estaría incurriendo en una clara "ocultación de pruebas", tal y como ha expresado Claverol, impidiendo a las "mujeres" defender sus testimonios de indefensión.

Por el momento, desde la Junta de Andalucía se trasladaba en la jornada del 21 de octubre que "una vez restablecido por completo el servicio, los usuarios que hayan tenido acceso limitado podrán consultar, descargar y visualizar con normalidad toda su información médica". Así, subrayaban que se encuentran realizando labores para que el servicio vuelva a la normalidad. El nuevo consejero de Sanidad, Antonio Sanz, el cuarto que ostenta el cargo desde que Moreno Bonilla llegara a la presidencia en 2018, negaba en el mismo día que desde el SAS se haya procedido a la eliminación o manipulación de los historiales médicos y llamaba a AMAMA a dejar "de lanzar infundios y de intentar desprestigiar al sistema público de salud y a los profesionales".

El responsable del área sanitaria en el Ejecutivo andaluz se mostraba severo, si bien también argumentaba respetar la decisión de la asociación de acudir a la Fiscalía y que se halla dispuesto a colaborar al "100%" para llevar a cabo una muestra de transparencia con la que se eliminen dudas acerca de esta situación. "No hay destrucción ni manipulación por parte del Servicio Andaluz de Salud", expresaba.

Entre nuevas incógnitas que surgen en pleno caos por los cribados del cáncer de mama, por los cuales al menos 2.000 mujeres, que se conozca de forma oficial, llevan un año o más sin conocer los resultados de sus pruebas, surge este nuevo episodio que genera, otra vez, desconfianza entre los andaluces, pues en el recuerdo cercano está que, cuando este asunto saltó a los titulares, lo que eran "tres o cuatro casos aislados" se convirtieron en miles que podrían, incluso, multiplicarse o afectar a otras enfermedades. Ahora, vuelve a darse un caso de denuncias de una situación que afecta a varias mujeres y que ha llevado a la Junta de Andalucía a hablar de fallos "temporales", una circunstancia que deberá ser esclarecida.

Los primeros días de Antonio Sanz como consejero de Sanidad están siendo llamativos, ya que hace escasos días propaga de nuevo el bulo de que el protocolo de asistencia del cáncer de mama de 2011 no incluía la obligación de comunicar el resultados de las pruebas si eran negativos y, ahora, enfrenta este suceso que vuelve a despertar dudas entre los vecinos de la comunidad autónoma.

Síguenos en Google Discover y no te pierdas las noticias, vídeos y artículos más interesantes

Síguenos en Google Discover