El alcalde de Torrox, Óscar Medina (PP), ha vuelto a ser protagonista de una nueva polémica tras referirse al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, como “retrasado” durante un encuentro informal en la radio pública. La conversación, grabada y difundida en redes sociales, incluye expresiones ofensivas y discriminatorias que han provocado una oleada de críticas por su carga insultante hacia el jefe del Ejecutivo y su lenguaje capacitista, inadmisible en boca de un cargo público.
Las ofensas no son nuevas. Desde hace años, se le critica a Medina una incontinencia verbal grosera que ha convertido en norma en sus declaraciones como representante institucional. “Es que es retrasado… el presidente del Gobierno es retrasado”, se escucha decir al regidor en el audio, mientras la periodista muestra una expresión de perplejidad. El comentario ha generado un rechazo inmediato por parte de colectivos sociales, partidos de la oposición e incluso voces del propio Partido Popular, que se han visto obligadas a marcar distancia.
Durante su intervención en la emisora municipal, el alcalde lanzó varias descalificaciones personales contra Sánchez. “Este hombre es retrasado mental o es el número uno”, afirmó Medina, seguido de una tibia matización: “con todos los respetos a la gente”, que no logró suavizar el impacto de sus palabras. También calificó al presidente como “un psicópata” y añadió que “está malito”.
El regidor, que ocupa el cargo desde 2015, justificó su diatriba señalando: “Es el tío que más manda en el PSOE, no deja hablar a nadie, ni a Page. O es el número uno o hay que llevarlo al Taller de la Amistad -bueno, no, que es capaz de llevarse hasta los jabones-, a San Juan de Dios en Ciempozuelos”.
La mención al Taller de la Amistad ha causado una profunda indignación, ya que se trata de un centro que atiende a niños con necesidades especiales y a personas con discapacidad. El centro cuenta con un taller ocupacional donde se fabrican jabones, hecho que el alcalde usó como burla. Esta organización realiza una labor fundamental en la comarca, especialmente en Torrox, Frigiliana y Nerja. Actualmente, su centro de atención temprana atraviesa dificultades de financiación, situación que atribuyen a la Junta de Andalucía, gobernada por el PP, el mismo partido del alcalde.
“Sánchez es un sinvergüenza”
Durante otro momento de la entrevista, y al hilo de una polémica local sobre el impago a los voluntarios de la Fiesta de las Migas -a quienes Medina aún no ha abonado la compensación prometida-, el alcalde insistió en sus ataques personales: “Sánchez es un sinvergüenza… es un psicópata, este señor está malito”.
Organizaciones defensoras de los derechos de las personas con discapacidad intelectual, así como la oposición, han condenado el uso de este tipo de expresiones, recordando que perpetúan estereotipos ofensivos y son especialmente graves cuando proceden de una figura institucional.
El PSOE ha exigido una rectificación pública y ha denunciado que este episodio no es un hecho aislado. “No hablamos de un error puntual, hablamos de un patrón de conducta impropio de un representante público”, ha afirmado un portavoz socialista local.
Más controversias: Frivoliza con un asesinato, insulta a parados e inmigrantes
La actitud de Medina ha sido objeto de críticas desde hace años. Tras el asesinato de una vecina a manos de su marido, el alcalde declaró: “Me quedo con la parte positiva” de que Torrox saliera en los medios nacionales y fuese conocido.
En 2011, durante un acto de campaña, se refirió a las personas desempleadas como “barrigas agradecidas”, lo que generó un amplio rechazo. Posteriormente, alegó que sus palabras fueron “tergiversadas”. No obstante, insistió en esa línea proponiendo una tasa de cinco euros para los desempleados que quisieran optar a contratos con el Ayuntamiento.
En marzo de 2014, se refirió a los funcionarios de la Junta de Andalucía como “tontos útiles”, asegurando que esa administración “se lleva la palma en número de tontos por metro cuadrado”.
Su equipo de gobierno también ha sido criticado por actitudes similares. En octubre de 2023, el concejal de Cultura, Salvador Escudero -cercano a Medina- comparó a los inmigrantes con “animales”, sugirió “marcarles” o ponerles pulseras, y advirtió que podrían traer enfermedades como el tifus o robar coches.
Denuncias de autoritarismo y bloqueo institucional
Desde la oposición también se ha denunciado el bloqueo de preguntas en los plenos municipales. En una ocasión, Medina levantó abruptamente una sesión para evitar que se hablara sobre la piscina de una concejala del PP, pese a la insistencia de la oposición en pedir explicaciones.