El autobús de Hazte Oír, lejos de cosechar éxitos, está teniendo muy mala experiencia en su cruzada ultracatólica contra los niños transexuales. Lo último ha sido su desafortunado paso por Nueva York, donde el vehículo ha aparecido con agujeros en los cristales y varias pintadas con mensajes como "Liberación trans" y "Derechos de los trans ya".

Arsuaga carga contra los "radicales LGTB"