El papa Francisco fallecía a primera hora de este lunes, 21 de abril, en su residencia de la Casa Santa Marta del Vaticano a causa de un ictus cerebral, tal y como confirmó a última hora del día El Vaticano. La noticia saltaba al filo de las 10:00 horas, mientras que los matinales de nuestra parrilla se encontraban en plena emisión. Entre ellos, Espejo Público, desde donde Gonzalo Miró señaló una curiosa coincidencia que rodea a la muerte de Jorge Mario Bergoglio.
La información conmocionaba a la sociedad, ya que la última aparición pública del pontífice se producía tan solo 24 horas antes, cuando aparecía este Domingo de Resurrección en el balcón principal de la basílica de San Pedro para pronunciar la bendición 'Urbi et Orbi' ante los fieles congregados en la célebre plaza de El Vaticano. Además, el argentino también recibió al vicepresidente de los Estados Unidos, J. D. Vance. Aunque se pudo apreciar su desmejora física, sus últimas apariciones hacían pensar en una mejora de su estado de salud.
Sin embargo, el papa Francisco fallecía a las 07:35 horas del Lunes de Pascua. Tras la noticia, el programa de Atresmedia ofreció la última hora y repasó los 12 de años de legado que el religioso dejó tras de sí. "En Roma se había ganado el corazón de la gente, pero también tenía detractores dentro de la propia Iglesia. Los sectores más conservadores lo habían criticado", señalaba Susanna Griso, recordando el cariño y admiración que Bergoglio logró despertar en los creyentes, pero también las críticas de aquellos que no vieron con buenos ojos sus aires reformistas.
La presentadora daba paso a sus colaboradores y Gonzalo Miró tomaba el testigo, aportando su propia reflexión sobre la figura del Papa: "A esos críticos dentro de la Iglesia, a lo mejor, los ganaba fuera de ella. Para los que no somos religiosos, daba la sensación de que, dentro de lo conservadora que es la iglesia, él era un Papa progresista, entre comillas. Al menos, todo lo progresista que puede permitirse ser un Papa". Entonces el también tertuliano de La Roca o Más Vale Tarde remarcó un aspecto cuanto menos simbólico a sus ojos: "Dentro de lo esperada que puede ser la noticia, por cuál era su condición, da la sensación de que ha elegido el día". Y es que, el Lunes de Pascua es una de las fechas más destacadas del calendario cristiano.
Por otro lado, Rubén Amón quiso ser un poco más crítico con el pontífice y su labor dentro de la Institución: "El Papa ha sido un activista en lo social, pero ultraconservador en lo religioso y dogmático. Ha habido una revolución en las formas, sí, pero no en las esencias".
Los aires reformistas del papa Francisco
El papa Francisco ha sido el máximo líder de la Iglesia católica desde el año 2013. Durante más de una década, el religioso ha demostrado su aperturismo en el seno de la Institución, ganándose las críticas de multitud de detractores. Siempre con un tono cercano y sereno, apostó por una Iglesia más comprometida con la justicia social y condenó sin ambigüedades los abusos sexuales dentro del clero. Además, también abrió el debate sobre el celibato sacerdotal, propuso una mayor participación de las mujeres en puestos de liderazgo y tendió puentes hacia la comunidad LGTBIQ+. Sus propuestas despertaron polémicas, pero también le ganaron el apoyo de millones de fieles que vieron en él a un Papa humano y dispuesto a escuchar.
En el plano internacional, Bergoglio no se quedó al margen. Jugó un papel clave en el histórico restablecimiento de relaciones diplomáticas entre Cuba y Estados Unidos, un movimiento que marcó un antes y un después en la política latinoamericana. También denunció con contundencia las guerras en Ucrania y Oriente Medio, alzando la voz contra la violencia y el drama de los refugiados. Su mensaje fue claro desde el principio: por encima de los intereses geopolíticos deben estar la paz y los derechos humanos, por lo que no dudó en señalar los efectos destructivos del autoritarismo y en reclamar más justicia para los pueblos oprimidos.
En sus viajes apostólicos, Francisco puso el foco en quienes más sufren, visitando zonas marcadas por la pobreza, el conflicto y la exclusión, escuchado a migrantes, víctimas de guerra y comunidades perseguidas por su fe o identidad. De hecho, en 2021, hizo historia al ser el primer Papa en visitar Irak y su presencia en un país devastado por la violencia del Estado Islámico fue un potente mensaje de esperanza, reconciliación y unidad.