Elisa Mouliaá ha tomado asiento en el plató de TardeAR este lunes, 20 de enero, para reaccionar en riguroso directo a la declaración de Íñigo Errejón. En calidad de denunciante e investigado respectivamente, ambos respondieron ante la Justicia por el delito de presunta agresión sexual cometido por el expolítico y, tras su publicación, la actriz se ha abierto en canal desde Telecinco. Incluso ha respondido a todas aquellas personas que aseguraron advertir "contradicciones" en sus explicaciones ante el magistrado.

"Las dos versiones son iguales, lo que difiere es el consentimiento"

Desde el primer momento, Mouliaá ha expresado que ambas declaraciones "son las mismas" aunque hay una salvedad: "Algo bueno es que los hechos son los que son, mucha gente ha dicho que algo no cuadra en mi versión. […] Lo que difiere es el consentimiento".

Y ha sido precisamente en este punto cuando la intérprete ha respondido a todas esas personas que hablaron de contradicciones: "Yo sabía que era la presentación de su libro", ha continuado explicando, reiterando que ella siempre dijo que los hechos ocurrieron "en Matadero" y "a finales de septiembre o principios de octubre". 

Cronología de los hechos: "Hubo primero una agresión en el ascensor"

Tras aclarar este punto, la cronología de los hechos se convertía en protagonista. Y es que, según ha explicado en TardeAR, "él dice que me cogió de la mano y nos fuimos juntos a besarnos cuando, en realidad, me cogió del brazo y me llevó a la fuerza a la habitación y me empujó contra la pared".

La cuestión es que previamente hubo otro desencuentro entre ambos, según ha relatado la intérprete: "Primero hubo una agresión en el ascensor", ha dicho, para continuar asegurando que su actitud se mantuvo con el paso de las horas. Ante este planteamiento, Xavier Sardà ha querido conocer el motivo por el que decidió salir acompañada de Errejón después de la fiesta.

"Tengo una enorme laguna y no me acuerdo absolutamente de nada"

Respecto al motivo por el que se dirigió con el expolítico a su domicilio, Mouliaá ha sido rotundamente clara: "Tengo una enorme laguna y no me acuerdo absolutamente de nada. Yo tengo un flash de él poniéndome la chupa y el bolso, diciendo que el coche llevaba esperando cinco minutos. Yo no recuerdo cómo entramos en ese coche, no sé si era un taxi, un Uber o qué".

"Habíamos bebido. Yo sé que iba bastante ebria", ha continuado detallando en TardeAR. Y ha sido entonces cuando ha admitido entender "que la gente se pregunte por qué" luego fue hasta la casa de Errejón. No obstante, tampoco ha querido dejar pasar la oportunidad de confirmar que el expolítico le puso "tres reglas", siendo la primera de ellas que "no se alejase" de él durante la noche.

"Yo qué voy a imaginar que este señor es un loco", ha señalado Mouliaá. Y es que segundos antes, la actriz confirmaba no haber entendido ese momento en el que le imponían las citadas normas. Según sus palabras, esa conversación no fue para nada en tono de broma o humor, sino que las percibió como si le lanzaran "una orden" que debía cumplir.

¿Por qué dimite Errejón si se declara no culpable?

La pregunta que se ha escuchado al instante en el plató de TardeAR tiene que ver directamente con la renuncia de Errejón a su actividad política: "Él dimite después de que esta periodista lanzase todos estos testimonios anónimos contra él. Si yo hubiera denunciado antes, se me habría tomado por loca. Ahora, encima que lo estoy denunciando después de que haya testimonios contra él y después de que él haya dimitido, se me toma por loca… ¡Es alucinante!"

Y curiosamente, Mouliaá ha utilizado este mismo término para referirse a que el político negase "ciertas cosas que sabe que pasaron". "Se lo relaté luego a mis amigas y es que todo lo que cuento es lo que ocurrió. Tengo que demostrar con pruebas que no hubo consentimiento. Él borró absolutamente toda la conversación, pero yo guardo una captura de pantalla previa", ha explicado después.

"Mi cuerpo se sintió humillado y vejado"

Por su parte, Errejón "sostiene que es falso" porque después continuó manteniendo conversaciones con la actriz, según ella misma ha comentado en Telecinco. Y este ha sido otro de los temas a tratar: "Durante estos dos años, como no me atreví a denunciar, yo solo contestaba", ha señalado Mouliaá. Y lo cierto es que tardó bastante tiempo en ser consciente de lo que había ocurrido realmente.

"Me doy cuenta a los meses, seis o siete meses, de que mi cuerpo se sintió humillado y vejado. Como sociedad se nos ha metido que hay muchos babosos que se sobrepasan. Cuando tú integras que alguien con poder usa su poder como le ha dado la gana", ha comunicado en riguroso directo.

La declaración de Íñigo Errejón ante el juez

En su declaración ante el juez, Íñigo Errejón negó haber dimitido de su cargo en Más Madrid por la denuncia interpuesta por Elisa Mouliaá y otras denunciantes, sino por la pérdida de confianza en el partido: "Cuando uno es político y pierde la confianza en sus jefes, se tiene que ir. Militaba en un espacio político que tiene a gala defender que cualquier testimonio, aunque sea anónimo y aunque sea en redes, es plena y directamente válido. […] No puedo ser portavoz de un espacio así y a la vez defender mi inocencia; entonces yo tengo que dar un paso atrás, y doy un paso atrás", expuso en los Juzgados. 

En cuanto a las declaraciones de Mouliaá en las que exponía su gran incomodidad durante el episodio vivido con el expolítico, Errejón alegaba que ella no manifestó nada de lo expuesto: "Ni en la habitación, ni cuando luego nos fuimos a mi casa. Si yo hubiera visto, como algún malestar por su parte, o en el bar, o en el taxi, o en el ascensor, o en la fiesta, o en la habitación, no le propongo que se vaya a mi casa". El expolítico solo reconoció que ella le dijo que estaba agobiada por su hija y que se quería marchar. 

El exdiputado en su línea de negar los hechos negó que la denunciante se hubiese resistido, reiterando que todo lo sucedido fue consentido: "No soy una mala persona, pero, además, soy una persona pública". Asimismo, con respecto a las conversaciones previas "y subidas de tono", el expolítico explicó que hablaron entonces de mantener relaciones sexuales, aunque no hubo un acuerdo expreso o "contrato". Con todo esto, Íñigo Errejón se mantiene firme, la denuncia de Elisa Mouliaá es categóricamente falsa.