Si hay una pareja que se ha vuelto emblemática en las instalaciones de Atresmedia es la conformada por Alberto Chicote y Cristina Pedroche. Los presentadores se sitúan cada año frente al reloj de la Puerta del Sol para dar la bienvenida al año nuevo junto a los espectadores. Por parte de la vallecana ya van once, mientras que el chef acumula nueve consecutivas. Hasta este año habían logrado mantener la corona, pero Broncano y Lalachus les destronaban con los últimos compases del 2024. Durante la retransmisión de las últimas Campanadas, los de la televisión pública gritaron desde su balcón a los de Atresmedia, lo que provocó que estos pusieran un biombo que impidiera la comunicación. Ahora, meses después, Chicote no ha ocultado que los saludos de los humoristas no le gustaron.
El cocinero visitaba el podcast Vaya Vaina, presentado por Dani Gordo y Alfonso de la Rocha. Los jóvenes le preguntaron por este momento de la retransmisión en el que los espectadores de TVE vieron como los de La Revuelta saludaban a gritos a sus compañeros de balcón. Aunque no lograron respuesta alguna, las cámaras de la pública llegaron a mostrar en pantalla a Chicote y Pedroche, por lo que el equipo de Atresmedia colocó un biombo para evitar que volviera a ocurrir.
Chicote se pronunció por primera vez sobre este gesto, que fue muy comentado en redes sociales: "Nosotros estábamos ahí, nosotros tenemos un montón de espectadores. Cuando hago Campanadas siempre tengo muy presente que al otro lado de la tele hay seis millones y pico de personas que nos han elegido para vernos y que quiere que todo salga bien". De manera más clara aún, añadía: "Yo no puedo romper eso porque hay alguien que nos está dando voces desde el otro balcón. Yo estoy con mi público", se defendía.
El presentador de Pesadilla en la cocina no se refería directamente a Broncano y Lalachus, pero sus palabras dejaban ver que no le hizo ninguna gracia la actitud de sus compañeros: "Cada uno hace lo que quiere, ahí no digo nada. Nosotros en el momento en el que nos fuimos a una publicidad, en ese momento que sé que no estoy en directo y con mi público, saludo, buenas noches y aquí paz, después gloria".
Al margen, Chicote recordó cómo empezó su andadura en las Campanadas, algo que nunca llegó a imaginar: "Tú no puedes soñar con eso. No te alcanza. ¿Cómo vas a pensar que tú vas a dar las Campanadas? Pero, evidentemente antes de que la tele llegase a mi vida ni de broma, después tampoco porque nosotros estrenamos Pesadilla en la cocina el 25 de octubre de 2012 y la llamada para hacer Campanadas ese año debió ser dos o tres semanas después", recordaba cómo le llegó la propuesta.
El chef entró en detalles y relató cómo fue ese telefonazo en el año 2012: "Recibo una llamada del que era el director general de laSexta entonces, Mario López y me dice oye Alberto te llamo para proponerte una cosa, le digo tú dirás. Y me acuerdo exactamente de donde estaba. Subía por la Gran Vía porque estaba buscando local y me dice que si quiero hacer las Campanadas y me acuerdo que le dije 'déjame que le de una vuelta". "Es verdad que yo en aquel momento hubiese dicho sí inmediatamente, pero estaba en un mundo desconocido y nuevo y dije 'voy a llamar a mi representante'. Recuerdo que le dije: '¿hay algún motivo para que le diga que no a hacer las Campanadas?", contaba.
Chicote desveló la respuesta de su representante, que conllevó al 'sí, quiero' posterior: "Y lo único que me dijo fue hay gente que ha hecho las Campanadas y ha metido la pata en un número o en algo y de repente estás en el 2024 y te están diciendo ¿os acordáis cuando en el 83 no sé quien metió pata? Entonces me dijo que lo único que podía pasar era eso".
Desde entonces, ya acumula nueve Campanadas a sus espaldas, en las que junto a Pedroche conforma un dueto de oro en términos de audiencias: "Yo no puedo hacer nada para que la gente me vea más o me vea menos, más allá de lo que hace la cadena de las promociones o de toda esta historia. A mí que digan viene este o viene este otro y van a hacer aquello, a mí lo único que me interesa es lo que voy a hacer yo y hacerlo lo mejor posible. Como creo que eso lo tengo más que demostrado, por eso la cadena confía por undécima vez pues entonces mi objetivo fundamental es que eso salga de puta madre. Lo único que pregunto cuando me dicen estamos fuera es preguntar si ha ido todo bien, yo me voy al restaurante, me tomo una copa con el equipo y adiós", se sinceraba al respecto.
