Han pasado solo tres días de la celebración del 8M, que marcó un antes y un después en la lucha feminista. Cientos de miles de personas salieron a las calles de las principales ciudades españolas, reclamando una igualdad real en la sociedad, y el fin a la violencia machista que tantas mujeres sufren actualmente.

Y, aunque el viernes fue un día icónico que demostró que algo está cambiando, no podemos decir que nuestra sociedad esté libre de la lacra que es la violencia de género. Solo hay que mirar lo que ha pasado tras el 8M, durante el fin de semana.

Tres mujeres han sido asesinadas durante las siguientes 48 horas, después de las multitudinarias manifestaciones que convirtieron las calles de toda España en una ola morada. Valga (Pontevedra), Estepona (Málaga) y Madrid han sido los lugares donde han ocurrido estos crímenes machistas, que suman ya 12 víctimas mortales en los apenas tres meses que llevamos de 2019.

Con estas muertes, nos vamos acercando a la aterradora cifra de 1.000 mujeres asesinadas por sus parejas o exparejas desde 2003 que existen registros (984 hasta ahora).

Nuria González, abogada y presidenta de la asociación L'Escola AC, ha hablado con ElPlural.com, y ha declarado que cree que en el 8M "hay una reacción en general al avance del feminismo en toda la sociedad", pero que "los sistemas de protección no están funcionando".

“Yo creo que hay una relación inversa entre lo que estamos pidiendo las mujeres en las calles y la respuesta pública que se está dando, que es que no está funcionando”, ha explicado, añadiendo también que “las leyes de violencia de género son unas buenas leyes, pero hay que revisarlas y poner sobre todo más medios" porque “no funciona que la primera persona a la que vean las víctimas sea un abogado, funcionaría mucho mejor que fuera un trabajador social o alguien que les explicara cuál va a ser el recorrido de la denuncia que van a poner”.

Desde la Federación de Mujeres Progresistas, María José Bueno, responsable del área de Violencia de Género, no sabría decir si los tres asesinatos del último fin de semana y las movilizaciones del 8M tienen algún tipo de relación, pero si cree que "la vinculación es la contraria, es cómo nos dan la razón esos asesinatos para salir a las calles, y seguir luchando y peleando porque no se dé ni un paso atrás en nuestra lucha".

Además, para intentar mejorar la situación de las mujeres víctimas de violencia machista, Bueno habla de mejorar todas las áreas, como las relacionadas con la protección y la seguridad hacia las mujeres, pero sobre todo poner el foco del problema en la educación: "No debemos olvidar que el origen de la violencia es la educación y la crianza que reciben los niños desde la infancia, cómo las desigualdades que se van dando en la socialización de manera sutil terminan por producir esta violencia en las parejas, o en otras esferas de nuestra vida social como las agresiones sexuales".