Marcos Benavent, principal investigado del caso Taula junto al expresidente de la Diputación Valencia, Alfonso Rus, ha llegado a los juzgados acompañado de su nuevo abogado, Juan Carlos Navarro, con la firme intención de darle un vuelco a la investigación. De hecho, la expectación por lo que pueda declarar es tal, que el magistrado instructor no ha dejado que ningún abogado esté presente pues son más de 100 y superan el aforo del juzgado. Verán la declaración desde sus despachos. Según las fuentes consultadas, Benavent ha declarado: "Manipulé las grabaciones, hice corta y pega".

Pero además ha afirmado que no son 'reales' porque manipulaba a sus interlocutores buscando la respuesta que necesitaba y, una vez tenía lo que quería es cuando, las guardaba y borraba las partes que no le interesaban. Ha asegurado que con su forma de actuar le ha hecho daño a muchísmas personas. Es más, ha llegado a decir que ha mentido en las declaraciones anteriores.

También ha atacado a la denunciante, la actual consejera del Gobierno valenciano, Ximo Puig, Rosa Pérez Garijo, de la que ha afirmado que llegó a acuerdos con su exsuegro y con "otras personas" para conseguir el puesto que tiene actualmente. 

A su llegada, con un look más hipster de lo que solía tener, Benavent no ha querido atender a lods medios, cuando hasta la fecha siempre se ha parado y ha hecho gala de ese humor que le ha hecho famoso con frases como "aquí va salir mierda a punta pala". A la salida, más de lo mismo, ni una palabra a nadie. Benavent no quiere ir a la cárcel, y para ello hay que cargarse la investigación, el problema es que esas grabaciones que hizo están avaladas por la Audiencia Provincial y sus declaraciones previas.

Según las fuentes consultadas por ElPlural.com Benavent, más conocido como el Yonki del dinero,ha hdejado de colaborar y trata de conseguir la nulidad de las grabaciones que el mismo realizó, al más puro estilo Villarejo, durante años.

Aunque no ha hablado directamente sobre los papeles que la Guardia Civil encontró en un registro, y que supusieron la apertura del caso Erial, que investiga el presunto amaño de contratos por parte del expresidente de la Generalitat, Eduardo Zaplana. Si consiguen que la causa de Taula caiga por la manipulación de las grabaciones, el caso Erial podría caer en cascada.

Sobre el registro en el que aparecieron los papeles que, posteriormente, sirvieron para abrir el caso Erial, Benavent ha dicho que la Guardia Civil entró a sangre y fuego, que se lo llevó todo, lo que le dejó sin posibilidad de defensa, y que los agentes recogieron todo sin numerar o hacer un resumen de lo que se llevaban. Pero según las fuentes de la investigación, esa documentación está perfectamente numerada y se recogió con todas las garantías legales. También afirman que lo dicho de las grabaciones no afecvtará a la investigación "en absoluto".

Dos macrocausas pendientes  de las declaraciones del yonki del dinero y de la decisión del juez instructor. Aunque según los investigadores: "No hay preocupación en absoluto".