La Sección de Delitos de Odio de la Fiscalía Provincial de Valencia ha denunciado en el juzgado a la tertuliana de extrema derecha y confundadora de Vox, Cristina Seguí, por publicar en Twitter el vídeo de tres menores de edad de 12 y 13 años, dos de las cuales fueron violadas, una de ellas grupalmente, sin pixelar las caras de las niñas y ofreciendo datos personales que podían llevar a su identificación.

El Ministerio Público ha decidido denunciar tras abrir unas Diligencias de Investigación Penal de oficio. En dichas DIP, el Ministerio Público investigó, además de la exposición pública de las niñas, los comentarios vertidos por Seguí con dos de ellas.

Así, según consta en el decreto firmado por el fiscal jefe de Valencia, José Órtiz, al que ha tenido acceso ElPlural.com, las DIP se abrieron a raíz de un correo electrónico recibido en el que se ponía de manifiesto la publicación realizada por Seguí. “Los hechos denunciados podrían ser constitutivos de un delito contra la intimidad tipificados en los artículos 197 y siguientes, y/o un delito de odio tipificados en el artículo 510.1 del Código Penal. En consecuencia, se acuerda formular denuncia ante el juzgado de instrucción decano de Valencia para que la remita al juzgado de instrucción, que por turno de reparto corresponda, e incoe el procedimiento correspondiente”, dice el decreto.

Los hechos

Los hechos sucedieron el pasado 21 de mayo. El día anterior, dos menores de 12 y 13 años fueron violadas en una casa abandonada. Una tercera niña fue la que recibió un mensaje de una de las menores agredidas y avisó a sus padres de lo que estaba sucediendo en una edificación de un municipio valenciano. Fueron ellos quienes alertaron a la Policía de lo que estaba pasando en Burjassot.

Al día siguiente de la agresión, la tertuliana de extrema derecha encontró un vídeo en las redes sociales de las niñas, en este caso Instagram, y no dudó en publicarlo varias veces acusándolas de haberse inventado los hechos. Unos hechos que no solo vienen avalados por las declaraciones de las víctimas sino por el informe de la forense de guardia que las atendió en el hospital.

Así, Seguí dijo, entre otras cosas, en su cuenta de Twitter: “A estas horas, NINGÚN MEDIO ha rectificado su información sobre las 2 NO violadas de Burjassot que un sexo consentido con otros menores para que denunciasen falsamente por violación y así salir en televisión. Saben cuál es la verdad y que esta atenta contra sus intereses”.

La ultraderechista se convirtió en tendencia en esta red social tras la publicación de los vídeos. A este respecto, Seguí escribió en su cuenta: “Gracias por hacerme TT, así me ayudáis a difundir el vídeo de la NO violación de 15 y 16 años (tienen 12 y 13) que mantuvieron sexo consentido con un grupo de menores en Burjassot, Valencia, fueron de la izquierda para denunciar falsamente y ‘salir en TV’”.

La legislación

El reglamento general de protección de datos de la Unión Europea exige en su artículo 6 que para que el tratamiento de datos personales pueda ser lícito, tiene que haber consentimiento del afectado. Aunque en este caso resulta obvio que las niñas no han autorizado a los denunciados a publicar el vídeo, Facua recuerda que, aunque lo hubieran hecho, también se estaría produciendo una vulneración de la normativa. Y es que la Ley Orgánica de Protección de Datos de Carácter Personal y garantía de los derechos digitales establece en su artículo 7 que un niño menor de 14 años ni siquiera está facultado para autorizar el tratamiento de sus datos.

Las irregularidades se agravan también al tratarse de datos relacionados con agresiones sexuales. Y es que el citado reglamento europeo establece en su artículo 9, relativo al tratamiento de categorías especiales de datos personales, la prohibición del tratamiento de datos relativos a la "vida sexual" de una persona. En este sentido, las infracciones que afectan a los dos citados artículos del reglamento pueden sancionarse con multas administrativos de hasta 20 millones de euros.