La esperanza crecía en el Partido Popular al observar que se acercaba la fecha de clausura de dos de sus principales agujeros judiciales: la macrocausa Púnica y el caso Bárcenas. A la primera se le iba a dar carpetazo este mismo jueves 27 de agosto, mientras que la iniciada por los papeles del extesorero lo haría al día siguiente. Un alivio que nunca llegará gracias a una reforma procesal de PSOE y Unidas Podemos.

El pasado mes de julio, PSOE y Podemos acordaron una reforma de la Ley de Enjuiciamiento Criminal que establece que las investigaciones judiciales se desarrollarán en un periodo máximo de doce meses. No obstante, si se constatara la imposibilidad de finalizarlas, el magistrado en cuestión podría acordar las pertinentes prórrogas – con carácter ilimitado – de seis meses de duración cada una de ellas.

Esta reforma procesal contó, por supuesto, con la negativa del Partido Popular, quienes ya introdujeron un cambio previamente, en los años de Gobierno de Mariano Rajoy, que limitaban los plazos de instrucción de las causas judiciales

En este sentido, los populares buscaron el acercamiento de posturas con los socialistas para evitar que esta reforma incidiera sobre las causas ya iniciadas. De esta manera, tanto Púnica como el caso Bárcenas finalizarían en el plazo acordado.

Sin embargo, el PSOE no accedió a las condiciones impuestas por los conservadores y la reforma que vio la luz establece que los nuevos plazos de instrucción también se aplicarán “a los procesos en tramitación a la entrada en vigor de la ley”. Esto implica que la causa que investiga los conocidos Papeles de Bárcenas, pueda ampliarse un año más.

Así lo ha hecho el magistrado de la Audiencia Nacional, José de la Mata, quien ha postergado hasta el 29 de julio la investigación de la presunta financiación irregular del Partido Popular que se inició con la documentación sustraída al extesorero. Por lo tanto, el 29 de julio de 2020 se puso el contador a cero y el nuevo plazo vencerá el mismo día de 2021.

Macrocausa Púnica

Como ocurre con los Papeles de Bárcenas, la causa de Púnica no se cerrará este jueves tal y como estaba planteado. El magistrado titular del Juzgado Central de Instrucción número 6 de la Audiencia Nacional, Manuel García-Castellón, ha asumido que la investigación de las diferentes piezas que componen la macrocausa no se cerrará esta semana.

El juez abre ahora un plazo para estudiar qué hacer con cada una de las piezas que conforman esta investigación. Es decir, si decide concluirlas o prorrogar las pesquisas para mantener las diligencias abiertas.

Aguirre pidió al juez que ignorase la ley

La Audiencia Nacional debía decidir tras la solicitud de ADADE y PSOE de ampliar el plazo un año, pero Esperanza Aguirre -imputada- se opone a que esta se prorrogue. La exlideresa madrileña, a través de un escrito entregado al Juzgado, al que tuvo acceso ElPlural.com, argumenta que "no procede la prórroga del plazo de instrucción" porque el límite ya fue acordado. 

El 30 de noviembre de 2018 el juzgado instructor dictó auto por el que acordó fijar un plazo de 40 meses más de investigación, que se sumaban a los cuatro años que ya llevaba la causa. El tope, por tanto, se fechó para el 30 de marzo de 2022; pero la Sala de lo Penal lo recurrió y se acordó una nueva instrucción de 18 meses, fijando el 6 de junio de 2020 como fecha máxima porque más tiempo sería “desproporcionado y excesivo” (el coronavirus dilató el vencimiento).

Aguirre recurre a este argumento para recordar que fue “la Audiencia Nacional quien estableció el periodo máximo de duración de la presente instrucción” porque “era necesario arbitrar un plazo no excesivamente largo”.