Los productores ejecutivos del documental Rocío, contar la verdad para seguir viva han hecho público un comunicado en el que aclaran que ni Rocío Carrasco ni su actual pareja, Fidel Albiac, pidieron dinero por las confesiones de la hija de Rocío Jurado, y que fue la productora la que decidió remunerar las 60 horas de grabación con "la misma cantidad" de materiales televisivos similares, aunque la cifra es muy distinta de los grandes números que han publicado algunos medios de comunicación.

En comunicado, leído en el plató de Telecinco por la presentadora Carlota Corredera, los productores recalcan que ni Rocío ni Fidel "pidieron dinero a esta cadena ni a esta productora. Jamás nos exigieron nada a cambio. Ni dinero ni ninguna otra contraprestación. Querían que diéramos un formato en el que poder explicarse sin ser interrumpida ni juzgada”. 

"Una cifra que jamás fue cuestionada ni negociada"

"Fuimos nosotros, los productores ejecutivos y máximos responsables de esta serie documental los que decidimos que Rocío debía recibir una contraprestación por la intensa labor desarrollada en las cuatro semanas de rodaje, pero lejos de las cifras que se han publicado para invalidar su testimonio", precisan.

"Una cifra que jamás fue cuestionada, negociada ni comentada por ella ni por nadie de su entorno, Rocío solo nos pidió que se la escuchara", añade el comunicado.

La nota se ha hecho pública antes de la emisión del cuarto capítulo del documental Rocío, contar la verdad para seguir viva, en la que Rocío Carrasco cuenta los maltratos e infidelidades que sufrió por parte de su exmarido Antonio David Flores durante su matrimonio, así como su proceso de separación y la repercusión en sus dos hijos.

Una recomendación de los psicólogos

"Hubo quienes la volvieron a revictimizar automáticamente, la atacaron con el argumento de que lo hacía por dinero y lanzaron cifras escandalosas para menoscabar su credibilidad", afirman en su comunicado los productores, que recalcan que "desde el primer contacto, Rocío Carrasco nos contó que quería hablar únicamente porque necesitaba contar su historia públicamente y como parte del tratamiento como recomendación del equipo de psicoterapeutas que la tratan desde hace tiempo".

 "A través de este trabajo conjunto Rocío pudo por fin expresar todas sus emociones, contradicciones y sentimientos sin tener miedo. Esta catarsis que estamos viendo semana tras semana está siendo realmente liberadora para ella, según han corroborado sus psicoterapeutas", ha continuado leyendo la presentadora.