El escándalo de emisiones que asoló y dejó muy tocada a Volkswagen, en 2015, continúa en procesos judiciales, cuatro años después de que saltara la voz de alarma.

Mediante un periplo judicial en el que los clientes de la empresa alemana en España han mostrado e intentado demostrar las demandas colectivas de tal problema, la Audiencia Nacional española decidió obviar una decisión y derivarlo a la causa alemana, es decir, que decida la justicia alemana.

Por su parte, FACUA está defendiendo a 1.600 de sus socios afectados por el escándalo de las emisiones de Volkwagen, que cuenta con más de 40.000 conductores perjudicados.

Tras exponer el caso a la Audiencia Nacional y derivar sus intenciones judiciales a las del país de origen, FACUA ha propuesto un nuevo recurso con el cuál solicita al Tribunal Supremo español que tome medidas contra este hecho. Así pues, si no lo impide el Supremo, la única alternativa que les quedaría a los consumidores afectados serían la justicia alemana.

Por ello, la organización ha decidido que, bajo la ayuda de la federación de consumidores alemana VZBV, las personas afectadas generen demandas individuales en Alemania. Dado que con la ayuda de FACUA y el bufete de abogados alemán puedan interponer las demandas oportunas por el escándalo del Dieselgate.

De momento, los socios perjudicados esperarán la sentencia del Tribunal Supremo, a instancias de interponer demandas individuales en los tribunales alemanes. 1.600 socios de la organización ya han demandado a Volkswagen en Alemania.