Los incendios siguen golpeando con fuerza a España. Este domingo se ha declarado por la tarde un nuevo gran fuego en Boca de Huérgano (León) que se suma al de Ávila y a los que están ahora mismo activos en algunas zonas de Galicia. En total, las llamas han devastado más de 4.000 hectáreas.

La Junta de la Comunidad ha declarado el nivel 1 de incendios y medios terrestres y aéreos se encuentran ya trabajando para apagarlos y paliar las consecuencias. En el caso concreto del de Boca de Huérganos se prevé que sea necesario emplear más de doce horas para su control, según han informado fuentes presidenciales.

Asimismo, en Ávila las autoridades han ordenado desalojar la urbanización El picadero como “medida preventiva”, siendo esta una de las zonas más afectadas por el incendio de Santa Cruz del Valle. Las llamas de este han arrasado más de 1.800 hectáreas y fuentes apuntan a que puede haber sido provocado.

Situación en Galicia

No solamente Castilla y León, Galicia vuelve a ser, como sucedió en la primera oleada de incendios, una de las más afectadas por el fuego. Con ello, el incendio que más hectáreas ha quemado ha sido el de Boiro (A Coruña), que se ha llevado por delante más de 2.200.

Otro de los incendios violentos de la comunidad del norte es el de Verín (Ourense), que sigue estabilizado. También sigue activo el de Xuntáns, en Ponte Caldelas y el de O Pereiro, en A Mezquita.

En Pontevedra se encuentran igualmente estabilizados el de Saiar, localizado en Caldas de Reis, los de Mourentán, en Arbo y el menos grave en estos momentos si se compara con la virulencia del resto, el de Barcela. En total, los fuegos en Galicia han terminado con más de 4.000 hectáreas en la última semana.

Estabilización en Andalucía

Andalucía también sufre las consecuencias de los incendios. En este caso en Jódar (Jaén). Efectivos del Plan de Emergencia ante el Riesgo de Incendios Forestales en Andalucía (Plan Infoca) han dado por estabilizadas las llamas y ha informado a través de su cuenta de Twitter que se encuentran trabajando para el control 18 bomberos forestales y dos agentes de medio ambiente, así como dos vehículos pesados de extinción.