La Fundación Mensajeros de la Paz, fundada por el padre Ángel, ha sido la encargada de la gestión de la Residencia Suances, en Cantabria, desde agosto del año pasado para tratar, solamente, casos con coronavirus que afectan a personas mayores. Debido a la mejoría de los residentes por las vacunaciones, Mensajeros de la Paz ya no considera necesario que este centro esté dedicado exclusivamente a ancianos con coronavirus y, por ello, pasa a convertirse en un geriátrico normalizado.

A partir de este lune día 15 de marzo, la Residencia Suances inicia su andadura como Residencia Geriátrica normalizada. El padre Ángel se muestra “muy satisfecho” con la labor que en este centro se ha realizado para hacer frente a la pandemia: “Lo más importante era salvar vidas y estos trabajadores han hecho todo lo que estaba en sus manos para conseguirlo. La buena noticia es que ya no hace más falta”.

Por su parte, el gerente de Mensajeros de la Paz en Asturias y Cantabria, José Luis Campos, comenta, en referencia al acto que se ha realizado para conmemorar este cambio, que “se trata de un acto de agradecimiento, sobre todo al esfuerzo del personal que ha atendido todos estos meses a estas personas sin desfallecer, ya que es un centro que conlleva una gestión compleja”.

Hasta este último día de funcionamiento como centro para atención a ancianos con Covid-19, la Residencia Suances ha atendido a 459 personas (entre ingresados por el ICASS y Sanidad). De ellos, han sido dados de alta, tanto para ir a su domicilio, como para regresar a sus centros, 424. Las instalaciones han contado en todo este tiempo con dos médicos, tres enfermeras y un psicólogo y ha acogido casos positivos con sintomatología leve, fundamentalmente derivados de residencias de mayores.