A tan solo 27 kilómetros de Gijón se encuentra Villaviciosa, un pequeño pueblo de 15.000 habitantes. Un rincón de la región asturiana que alberga gran cantidad de patrimonio e historia entre sus calles, juntando los tradicionales verdes campos del Principado con su conocida ría que desemboca en la Playa de Rodiles. Ahora, su Ayuntamiento ha querido ponerlo en valor sacando a la venta sus cuatro palacios por un importe que va desde los 600.000 euros hasta los dos millones. Concretamente son el palacio de Sorribas, el palacio Balbín, el palacio de Posada y el de Caveda y Nava.
Por lo que se refiere al primero, su adquisición asciende hasta a los 2,3 millones de euros. La finca de Sorribas perteneció en su día a la familia de Valdés, marquesado del Real Transporte. Hace siete años recibió la distinción de Bien de Interés Cultural (BIC) del Principado por conservar una ventana con un alféizar perteneciente al periodo tardogótico, época de los Reyes Católicos. Además, la capilla con la que cuenta pertenece al siglo XVII y fue trasladada desde el valle hasta su actual ubicación. Al margen de este reconocimiento, la finca, a la que se accede a través de una pista forestal, cuenta con capilla, cuadras y muralla. En el interior de esta, el palacio también cuenta con puentes, caminos, cascadas y un monte privado. De puertas para adentro hay siete habitaciones y cinco baños, así como una pequeña explotación de manzanos de sidra “cuya producción tiene garantizada su venta”.
Por otra parte, referente al palacio Balbín, este está tasado por cerca del millón de euros. Algo más pequeño que el anterior, tiene una extensión de 700 metros cuadrados útiles que albergan varias bodegas, casa de guardeses, palomar y la casa principal. Además, está rodeado por un jardín de cuatro mil metros cuadrados delimitados por un muro de piedra. En el interior de las paredes de la casa principal, hay seis habitaciones y dos baños.
Estos dos inmuebles están ubicados en los alrededores del núcleo urbano, pero en el interior de este también se pueden encontrar otras de las construcciones que constituyen este patrimonio. Es el caso del palacio de los Posada, que se encuentra en la calle del Sol, justo enfrente del teatro Riera y la estatua de La Manzanera. Sobre este hay pendiente un proyecto consistente en llevar a cabo una rehabilitación para convertirlo en un complejo de lujo formado por dos apartamentos dúplex y otros seis con dos habitaciones cada uno. Al margen de este proyecto pendiente, la extensión del inmueble es de 552 metros cuadrados y está estructurado en cuatro pisos con una particular estructura que le otorga precisamente ese valor. Los tres pisos de la fachada principal están separados mediante cornisas. De estos, los dos superiores están decorados con molduras de orejas. El primero cuenta con balcón volado de hierro y el piso superior, con uno curvado y que recorre toda la fachada.
También en el interior del núcleo urbano y muy próximo a este, se encuentra la casa en la que vivió el historiador y político José Caveda y Nava, que como se lee en la misma fachada fue un “íntegro, repúblico y sabio académico”. Pese a que no está reconocido como palacio, construye también uno de los principales atractivos del municipio asturiano. Su valor asciende a los 600.000 euros e incluye cuatro viviendas y cuatro locales con fin comercial en la planta baja. De estilo barroco, el frente está hecho de sillares de piedra labrados.
Al margen de estos cuatro inmuebles que ya han salido al mercado, Villaviciosa cuenta también con joyas históricas en su casco urbano que lo convierten en un municipio rico de historia y cultura en el Principado. De este modo, en sus céntricas calles también se encuentra el palacio de los Peón, formado a su vez por el palacio de la Torre de la Pedrera y la capilla de la Concepción. Este espacio podría ser la próxima sede del Consejo Regulador de la Denominación de Origen Protegida (DOP) Sidra de Asturias y abrir ahí el Museo de la Manzana.