El calor sofocante del mes de junio contrasta con un julio anómalo, con temperaturas máximas y mínimas lejos de sus valores habituales. Aunque el mercurio se ha mantenido en una media normal, las caídas del mercurio han aliviado a España en una parte representativa del mes. Sin embargo, el clima tórrido volverá y esta vez no desaparecerá con facilidad. Las previsiones para el arranque de agosto no son nada halagüeñas. De hecho, tanto Mario Picazo como la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET) coinciden en sus pronósticos, augurando un inicio de mes con el mapa de España teñido de rojo fuego.
El meteorólogo ha publicado en su cuenta personal de X – antes Twitter – su vaticinio para esta última semana de julio, que engarza a su vez con la primera de agosto. De hecho, será el jueves cuando el séptimo mes del año se despida para que éste último recoja su testigo. Lo hará, además, con un notable contraste térmico. Las temperaturas despedirán julio “por debajo de la media” en buena parte del país, aunque el calor está dispuesto a dar por terminada esa tregua iniciada hace unos días.
El “azul/verde” que aparece en el mapa de España cambiará a un rojo intenso en los primeros días del mes de agosto. “Tiene los días contados”, avisa el meteorólogo. La semana que viene, que será la primera del mes completa, llegará un fuerte periodo de calor que elevará las “máximas y mínimas por encima de la media”.
Agosto tórrido
La última semana de julio y el inicio de agosto llegarán con temperaturas suaves en buena parte del país, alejadas de los extremos que han marcado veranos anteriores. Según la previsión a largo plazo de la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET), el este peninsular y Baleares vivirán una semana más fría de lo habitual para estas fechas, mientras que en el oeste el ambiente será algo más cálido. En cuanto a las lluvias, se esperan precipitaciones escasas, especialmente en la mitad sur de la península.
Este panorama contrasta con el del verano pasado. En 2024, julio y agosto estuvieron marcados por dos intensas olas de calor, una de las cuales se prolongó durante 21 días, siendo la segunda más larga desde que hay registros. A pesar de un mes de junio frío, el verano de 2024 acabó siendo el sexto más cálido del siglo XXI, solo superado por el de 2022.
De cara a los próximos días, la AEMET no prevé calor extremo, aunque sí se espera que las temperaturas vuelvan a subir ligeramente durante la semana del 4 al 10 de agosto, manteniéndose dentro de los valores normales para la época o algo por debajo en el este y Baleares. También podrían producirse algunas lluvias débiles en zonas del oeste y sur. Para la semana siguiente, del 11 al 17 de agosto, se espera un escenario más cálido de lo normal y seco en la mayor parte del país.
Este domingo, el termómetro ha subido con fuerza, alcanzando los 40 grados en algunas zonas, aunque solo cinco comunidades autónomas han activado alertas por calor. Las avisos amarillos se han emitido en Andalucía (Córdoba, Huelva, Jaén y Sevilla), Castilla-La Mancha (Toledo), Castilla y León (Ávila), Extremadura (Cáceres y Badajoz) y Canarias (Gran Canaria).
El lunes continuarán los avisos en el suroeste peninsular por altas temperaturas, mientras que en el noreste la atención se centrará en el viento fuerte y el mal estado del mar. Se prevén rachas de hasta 70 km/h en la costa catalana y oleaje intenso en Baleares. Así, el comienzo de agosto se perfila más templado que en años anteriores, aunque el calor podría intensificarse en la segunda mitad del mes.