Madrid ultima el anuncio de la organización de la F1 para acoger el Gran Premio de España en las inmediaciones de Ifema a partir del año 2026. Un circuito semiurbano, que discurrirá por Valdebebas junto a las inmediaciones de la Ciudad Deportiva del Real Madrid y que, a priori, tendrá coste cero para las arcas públicas.

Una situación ya conocida en Valencia, que tuvo su propio circuito urbano entre 2008 y 2012 y que tuvo un enorme coste al erario público de los valencianos. Y que sigue teniendo, en los presupuestos de la Comunidad Valenciana de 2024 se contempla la última partida para pagar deudas de los 60 millones del crédito para financiar parte de las obras del trazado que acabó costando 98,6 millones de euros, a los que suman los 111 millones que se abonaron en concepto de canon, otros 26 por los derechos televisivos y la deuda de 44 millones de la empresa Valmor que gestionaba el circuito. Cerca de 340 millones en total.

En 2018 se hizo público en el diario El Mundo el informe del despacho Garrigues que motivó uno de los escándalos más sonados de los costes de dinero público: el pufo que asumió la Generalitat al absorber Valmor, la sociedad a la que Bernie Ecclestone adjudicó los derechos de las carreras, y las ventajosas condiciones que obtuvieron los empresarios cuando se deshicieron de sus acciones porque el evento arruinó su empresa.

Garrigues avisó a la empresa pública Circuito del Motor -entonces presidida por la ex consellera Lola Johnson, que el contrato de traspaso de acciones contenía una serie de "cláusulas no habituales" que, al parecer, sólo beneficiaban a los empresarios.

Los propietarios de Valmor eran el ex piloto Jorge Martínez Aspar, el empresario Fernando Roig y Bancaja. Asimismo, Garrigues indicó que el contrato incluía "principalmente un reconocimiento por parte del comprador -la Generalitat- de la situación de desequilibrio patrimonial en la que se encuentra la sociedad -Valmor-" y que los empresarios no habían cumplido con su "obligación de formular, aprobar y depositar las cuentas anuales de 2010" ante el Registro Mercantil. Además, la Generalitat asumió el compromiso "de restablecer la situación patrimonial y de no instar al concurso voluntario de la sociedad durante los dos años posteriores a la firma del contrato", indica el informe publicado por el citado medio.

La oposición madrileña, preocupada

Una cuestión, la vivida en Valencia que pone sobreaviso a los grupos municipales en el Ayuntamiento de Madrid. Tanto Rita Maestre, portavoz de Más Madrid en el Ayuntamiento de Madrid, como Reyes Marto, portavoz del PSOE en el consistorio, han reaccionado a la información.

Rita Maestre ha remarcado en declaraciones a ElPlural.com: "Por desgracia, en España los grandes eventos de Fórmula 1 auspiciados por la administración tienen un historial de despilfarro y corrupción de gobiernos del Partido Popular". "A falta de que se confirme la noticia y de que podamos conocer los detalles, los cantos de sirena del “gratis total” para el erario público y las supuestas bondades de su impacto económico en la ciudad nos generan desconfianza. Más de 300 millones de euros les costó a los valencianos la celebración de cinco ediciones, mordidas en contratos públicos y sobornos al PP: ¿es ese el modelo de Almeida y Ayuso para Madrid?", ha añadido.

Por su parte, Reyes Maroto ha apuntado este martes en los actos institucionales por el Día de la Constitución que se han celebrado en los jardines de la Transición Española: "Tenemos mucha falta de información. No es oficial. Si se hace oficial y Madrid recibe ese premio será una buena noticia. Quiero pedir al Ayuntamiento que no deje pasar esa oportunidad. Estamos viendo y lo estamos denunciando en la Comisión de Urbanismo, que la falta de licencias está poniendo en riesgo a alumnos, a instalaciones deportivas... Lo que le pido es que si finalmente ese premio de Fórmula 1, no defraude".

De esta forma, ha exigido a José Luis Martínez-Almeida, "que las licencias lleguen a tiempo y que llegue a toda la ciudadanía y que no solo sea para los que se lo pueden pagar". "Es un gran premio que exige grandes cuotas de pago muy importantes", explicaba sobre las tasas elevadas que supone tener una entrada para los varios días que tiene el evento.

"Si la FIA lo confirma, pero exigiremos al Ayuntamiento de que llegue todo a tiempo. Lo estamos viendo estos meses, pero es una práctica de este Ayuntamiento: la falta de legalidad que hay en muchas obras, en muchas licencias que impiden que eventos puedan llegar a esta ciudad", expresaba dejando entrever que lo peor que puede pasar es que "el ayuntamiento no esté a la altura". Además, ha pedido "que se ponga todo el equipo necesario para que se pongan todos los recursos necesarios a los promotores y que sea un evento del que el pueblo de Madrid se beneficie y no solo para las élites".