Un local de Plasencia se suma a la irresponsabilidad. 350 personas fueron desalojadas el pasado domingo de un centro flamenco de la localidad por no respetar las medidas de seguridad con la distancia interpersonal o el uso de mascarillas. Además, el sitio superaba el aforo permitido.
Es tan solo otra imagen más que muestra la irresponsabilidad de algunos a pesar de los rebrotes que se están sucediendo en gran parte de España. Unos irresponsables a los que parece que se ven afectados, ni siquiera, por las consecuencias penales de sus actos.
En esta línea son ya varias las discotecas y los lugares de ocio nocturno que la Policía sigue desalojando. Los hechos, lejos de desaparecer, se suceden uno detrás de otro.
Sin ir más lejos, el pasado martes las autoridades valencianas desalojaban un local en el municipio de Alzira (Valencia) en el que unas 85 personas habían organizado su propia fiesta sin respetar las medidas higiénico sanitarias para prevenir la Covid-19.
El día anterior la Policía local también se vio obligada a irrumpir en una discoteca de Alicante que había habilitado la pista de baile para 66 personas. La mayoría de ellas (y las que estaban fuera de esta) no llevaban puesta mascarilla o no respetaban la medida de un metro y medio recomendada por Sanidad. El local se enfrenta a una sanción muy grave, que podría alcanzar los 60.000 euros.
Estos y otros casos convierten a la Comunidad Valencia en una de las más afectadas por las multas. De hecho, la Policía autonómica propone sancionar a 33 locales este fin de semana, según Las Provincias.
Sin embargo, la irresponsabilidad llega a todas las partes del país. En Vitoria, las autoridades desalojaron una discoteca el pasado 5 de agosto por permitir bailar a sus asistentes sin mascarilla. En el sur, concretamente en Málaga, no se puede pasar por alto la fiesta que fue multada entre, otras cuestiones, porque sus asistentes estaban escupiendo alcohol al público.
Si echamos la vista para atrás, en junio (y antes) ya había discotecas que se saltaban las normas de seguridad. En aquel mes, más de 150 personas eran desalojada por bailar "amontonadas y sin mascarilla" aunque los responsables lo negaran.
En Madrid también se han dado varios casos, unos de los más sonados fue el de la discoteca Bahía, situada en El Plantío, uno de los barrios más ricos de la capital. También en aquella ocasión 150 personas permanecían dentro bailando, sin usar mascarilla y sin respetar la distancia de seguridad. Además, el sitio carecía de licencia de terraza.
Son muchas las voces que se han alzado desde organizaciones y la propia ciudadanía. También desde el mundo de la cultura han criticado este aspecto, especialmente desde el polémico concierto de Taburete en el Starlite de Málaga en el que Willy Bárcenas, hijo del extesorero del PP animaba al público a quitarse la mascarilla.
